La Junta de Andalucía y el Gobierno están "analizando" la "paralización" de la comercialización del aceite de oliva y, sobre todo, la "bajada de precios" constatada en los últimos tiempos sin que, "a priori" sean movimientos que respondan "a una lógica de las habituales y normales en el mercado" oleícola.

Así se ha puesto de relieve este viernes en Jaén antes de una jornada enmarcada en las actividades previas a Expoliva 2013, donde han participado la directora general de Calidad, Industrias Agroalimentarias y Producción Ecológica de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente, Ana María Romero; el director general de Industria Alimentaria del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama), Fernando Burgaz, y los presidentes de Ferias Jaén, Luis Carlos García, y de la Diputación, Francisco Reyes.

Romero, que ha invitado a participar en la feria más importante del sector, entre el 8 y el 11 de mayo, ha comentado que esta cita se celebrará después de una campaña "absolutamente atípica", con "muy baja producción" y también en un momento "de paralización de la comercialización del aceite de oliva con una bajada de precios".

Al respecto, ha señalado que "en esta última semana no ha habido, por lo menos, según la información del Pool Red, ninguna comercialización" de este producto oliva. La directora ha indicado que parte del sector plantea que "está esperando las previsiones de campaña" y "otra parte, esperando cómo va la subida o bajada de los precios", ya que son muchos los que "están dejando de vender ante la proyección de bajos precios", que se encuentran "prácticamente como al comienzo de campaña e, incluso, en alguna categorías, más baja".

"Estamos intentado analizar la situación para que haya ocurrido después de una campaña que venía corta y que haya habido esta paralización y, sobre todo, esta bajada de precios", ha explicado la directora general, quien ha dicho ir de la mano del sector en esta tarea para poder fijar "una opinión consolidada y seria".

Seguimiento específico

Tampoco ha pasado desapercibido al Ministerio este panorama, expuesto recientemente, por ejemplo, por COAG, que ve "especulación" desde la distribución con una "estrategia clara de no comprar hasta la floración con el objetivo de poner nervioso al agricultor que se encuentra en una situación de ruina extrema". Tras recordar, igualmente, que esta campaña ha sido "muy peculiar", Burgaz ha afirmado que en el marco de la Agencia del Aceite de Oliva se viene realizando un "seguimiento específico" desde "hace unas cuantas semanas".

"Buscando información también de cuál es la situación en otros países en cuanto a niveles de producción y disponibilidades presentes porque, efectivamente, son movimientos que no obedecen así, a priori, a una lógica de las habituales y normales en el mercado del aceite", ha apostillado el director general de Industria Alimentaria. En cualquier caso, ha dicho no atreverse a apuntar actividades o iniciativas concretas a las que pueda responder, sino que más bien ha considerado que posiblemente "sea la conjunción de diversos comportamientos en diferentes operadores".

Mejora de la cadena

Junto a ello y preguntado por el elemento de la "tremenda transparencia" en el sector productor oleícola que, también según COAG-Jaén, "aprovechan las grandes empresas comercializadoras para saber hasta el último kilo y aprovecharse al fijar bajos precios", Burgaz ha aludido a la futura ley para mejorar la cadena alimentaria.

En este sentido, ha recordado que el proyecto de ley se encuentra en el Parlamento y, de hecho, este martes pasado terminó el plazo para presentar enmiendas, de modo que se prevé que "la próxima semana comiencen los trabajos en la Comisión de Agricultura del Parlamento para analizarlas", punto en el que ha precisado que el "empeño" del Ministerio pasa por tenerlo operativo "a la mayor brevedad posible".

"Nuestra idea sería poder tenerlo, incluso si es posible, antes del verano ya publicado en el Boletín Oficial del Estado para que pueda dar frutos", ha destacado no sin agregar que el objetivo de esta norma es establecer el marco y las reglas de juego pertinentes para que las relaciones entre todos los operadores se desarrollen "con la máxima transparencia y equidad en todos los escalones".