La directiva del recién electo presidente de la Real Academia Galega (RAG), Xesús Alonso Montero (Vigo, 1928), —Henrique Monteagudo (secretario), Andrés Torres Queiruga (vicesecretario), Rosario Álvarez (tesorera) y Margarita Ledo (bibliotecaria-archivera)— han coincido en descartar riesgo de fractura en dos bandos en el seno de la institución tras la ajustada votación que ha aupado a este intelectual vigués a encabezar un nuevo proyecto y los tiempos convulsos que ha vivido el organismo en los últimos meses.

El catedrático Xesús Alonso Montero ha sido elegido este sábado como nuevo presidente de la Real Academia Galega (RAG) en segunda votación, con 12 sufragios a su favor frente a los 10 que ha cosechado Manuel González, junto a una abstención, tras haber empatado en la primera consulta celebrada en el plenario.

De este modo, en declaraciones a Europa Press, el nuevo secretario de la RAG, Henrique Monteagudo, considera que existe "un riesgo menor" de fractura en la Academia, porque "uno de los elementos de tensión en la Academia fue toda la cuestión de las contrataciones y el tratamiento mediático que tuvieron y, aunque eso deja heridas, el elemento tensionador desaparece".

Y es que Monteagudo cree que "es la ocasión para un nuevo impulso", en contraposición a una directiva anterior "que estaba un poco gastada" con el fin de "intentar mejorar aquellos aspectos más cuestionables", que "son menores, pero que tienen mucha importancia".

"Como dijo Manolo Rivas en el pleno, hay gente que tarda más en curar, otra que tarda menos, pero la dinámica ahora es la contraria, venimos de una dinámica de tensionamiento creciente que la directiva saliente, no solamente no supo detener, sino que en algunos sentidos potenció; y, ahora, creo que tenemos que entrar en una dinámica de destensionamiento", ha abogado este sociolingüista.

Tras la dimisión de Xosé Luis Méndez Ferrín al frente de la institución se abrió el proceso para elegir al nuevo responsable. Al no llegar a un acuerdo para pactar una lista única, por primera vez en la historia de esta academia, fundada en 1906, se han presentado dos candidatos: por un lado, el hasta ahora tesorero de la RAG, Manuel González, que representaba el sector continuista con la línea marcada por Xosé Luis Méndez Ferrín; y por el otro, Alonso Montero, que encabeza el lado más crítico con la anterior directiva.

LEDO:

"no tendría sentido ninguno"

En esta línea, también en declaraciones a Europa Press, la ahora archivera de la RAG, Margarita Ledo, ha hecho hincapié en que la Academia "tiene una organización interna consolidada" y tras 107 años de historia "entra en una fase que debe dar cierta imagen pública que se está reclamando en estos momentos".

"No hay riesgo ninguno de fractura, ni tendría ningún sentido", ha zanjado Ledo, porque cree que la RAG tiene "unos objetivos muy claros, que son unos objetivos fundamentales que son los que comprometen" y cree que tan sólo "puede haber distintas opiniones sobre temas sociales o temas opinables, como pueda ser proponer candidato o candidata al Día das Letras".

Ya en lo tocante a su función de bibliotecaria-archivera, Ledo se ha marcado el trabajo de recuperar "todo un fondo de imagen" y de pequeños textos que le interesa "rehabilitar y poner en valor".

Torres queiruga:

"se clarifica la atmósfera"

Por su parte, el teólogo Andrés Torres Queiruga ha apuntado a Europa Press que "a pesar de que se distinguió entre continuidad y crítica" en las dos líneas que han confrontado a Alonso Montero y Manuel González en sus proyectos, cree que esta nueva etapa será "de continuidad".

Sobre estas dos facciones creadas en la RAG en los últimos tiempos, Torres Queiruga admite que: "Fue un pequeño temporal, que no se puede negar, pero creo que lo que hizo fue clarificar la atmósfera para ponernos a trabajar". "Yo creo que vino, como pasa en las pequeñas tempestades, el aire que da más claro", ha defendido.

Así, Torres Queiruga ha subrayado la "aclaración de trabajo interno" de la Academia del mandato que abre Alonso Montero, y ha matizado que "estaba ya todo muy orientado en el trabajo, con secciones montadas, por lo que, en el fondo, lo que se va intentar es una nueva etapa".

Rosario álvarez llama a "restaurar las heridas"

Sobre esta cuestión, la tesorera, Rosario Álvarez, ha llamado "a restaurar lo antes posible las pequeñas heridas y continuar hacia adelante".

Rosario Álvarez —que forma parte de un equipo que el propio Alonso Montero ha valorado como la directiva con más presencia de mujeres en la historia de la Academia— ha indicado: "Es una nueva etapa de trabajo, no quiero decir que la anterior ejecutiva no trabajase, pero, hay que tratar de impulsar una mayor participación de los académicos".

Al respecto, ha abogado por "intentar que este mal episodio que ocurrió quede olvidado lo antes posible". "Siempre la imagen que se transmitió a través de la prensa de crispación era de mayor crispación y enfrentamiento del que había realmente, pero no quiere decirse que haya que borrarse esa imagen", ha señalado Álvarez a Europa Press.

PROGRAMA

Así las cosas, en el programa hecho público el viernes del nuevo presidente de la RAG, Alonso Montero refleja las líneas principales que van a marcar su acción de gobierno, destacando la necesidad de "escuchar la voz de todos", mejorar la gestión, buscar la transparencia, sacar "mayor partido a sus recursos", reforzar su relación con las instituciones manteniendo su "independencia" y mantener una relación "amable y transparente" con los medios de comunicación.

En este sentido, defienden que el pleno debe estar informado en todo momento de las actuaciones que se lleven a cabo, sometiéndolas a su consideración.

Además de recordar que la RAG se diferencia del resto de instituciones culturales en que es la única facultada por Ley para decidir "lo que es correcto o incorrecto en la utilización de la norma culta del idioma", las líneas aclaran que ésta "es la razón fundamental" por la que "nunca será absorbida por otra institución" ni "se fundirá" con otra entidad.

El equipo propone crear una nueva sección de comunicación que buscará impulsar y reforzar desde el punto de vista lingüístico y mediante las nuevas tecnologías el uso correcto del idioma en los medios de comunicación e intentar incrementar su presencia.

También la creación de un nuevo seminario "de la norma", que se ocuparía de perfilar aspectos normativos "confusos o mal definidos" y elaborará dictámenes que serán debatidos en el plenario.

La sección de Lengua debe ser la "columna vertebral" de la RAG, prosigue el programa, por lo que sus tareas prioritarias serán la elaboración de la gramática y del diccionario. Asimismo, se debe reforzar el trabajo del Termigal.

Divulgación y transparencia

Entre otras acciones, la candidatura de Montero que ha resultado vencedora este sábado propone un folleto informativo destinado a la divulgación masiva, con el fin de profundizar y proseguir con al tarea de visibilización social de la "importancia" del trabajo de la institución.

Asimismo, para asegurar el funcionamiento regular de la RAG, ven "fundamental" conseguir la profesionalización de la gestión y contar con una relación de puestos de trabajo y de consolidación del cuadro de personal, con una clara definición del organigrama y funciones de cada empleado, y con un área "centralizada" de gerencia. También ven "urgente" establecer protocolos y criterios de contratación.

De esta manera, Alonso Montero será el relevo de Xosé Luis Méndez Ferrín, quien dimitió de su puesto en medio de una polémica por supuestas contrataciones irregulares y por las críticas de una parte de los académicos que lo acusaban de falta de transparencia.