La delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, ha inaugurado la constitución de la Comisión Provincial de Seguimiento del Acuerdo Marco sobre destrucción de drogas tóxicas, estupefacientes y sustancias psicotrópicas, tal y como ha informado la Delegación este jueves.

Participaron en este acto la presidenta y el fiscal jefe de la Audiencia Provincial de Madrid, así como representantes de la Jefatura Superior de Policía y de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid.

El objetivo de la Comisión es coordinar en el ámbito de la Comunidad de Madrid las actuaciones de las diferentes instituciones para la destrucción de alijos de drogas incautados en operaciones policiales, tras la reciente modificación de la Ley de Enjuiciamiento Criminal con la finalidad de evitar el almacenamiento innecesario de estas sustancias. Actualmente hay 21 toneladas de droga almacenada desde 2006 en la región.

La semana pasada, la delegada del Gobierno anunció que "en el plazo de un año" se habrá destruido la práctica totalidad de los grandes alijos de sustancias estupefacientes requisadas y que se almacenan en grandes instalaciones custodiadas por la Policía.

Cifuentes confirmó "el grave problema" que supone tener que almacenar y vigilar "los importantísimos alijos, que cada vez son mayores porque las incautaciones de droga son permanentes", en referencia a los robos perpetrados en dichas instalaciones.

En el mismo acto, el director general de la Policía, Ignacio Cosidó, explicó que el Gobierno central está trabajando en un reforma legislativa de la Ley de Enjuiciamiento Criminal para que se "agilice la destrucción de la droga", es decir, que se pueda destruir en un mes desde su aprehensión, dejando una pequeña muestra para la investigación y siempre y cuando el juez no determine lo contrario.

Además, Cosidó anunció que se mejorará la seguridad policial de los almacenes donde se guardan estas sustancias estupefacientes intervenidas "porque para la Policía es muy duro que se produzcan estos robos tras operaciones muy costosas en las que incluso han puesto en peligro su vida".

Esta agilización en el proceso de destrucción de la droga incautada se enmarca en el hecho de que el número de aprehensiones de grandes alijos de droga se ha triplicado en los últimos años, especialmente en el aeropuerto de Barajas, lo que ha retrasado la realización del estudio toxicológico de las sustancias decomisadas, tal y como consta en el informe del Defensor del Pueblo 2012.

Al incremento del número de estupefacientes intervenida se ha unido el hecho de que ha aumentado el grado de sofisticación de los procedimientos empleados para camuflar la droga, lo que ha derivado en "la ralentización del proceso de recepción, exigiendo especiales medidas de seguridad para el personal farmacéutico" del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses, donde se realizan los tests correspondientes.