La compañía Emalsa ha lamentado las interrupciones del servicio de abastecimiento de agua registradas durante la jornada de huelga del martes, 2 de abril, en Las Palmas de Gran Canaria y que relacionan "según se ha podido determinar en varios puntos de la red por acciones de sabotaje".

Al respecto, la empresa subraya que estas acciones "han afectado gravemente" durante varias horas al suministro de agua a varios millares de ciudadanos de la capital grancanaria, aunque finalmente quedó restablecida la normalidad del suministro.

Asimismo, se ha informado de que esta circunstancia ha sido puesta en conocimiento de los responsables municipales del servicio que gestiona Emalsa para que se adopten las medidas legales que se consideren oportunas, según indicó la empresa en un comunicado.

Por otro lado, Emalsa ha establecido las medidas de vigilancia "adecuadas para evitar tan lamentables" incidencias e insiste en pedir disculpas a los usuarios por las molestias ocasionadas.

También ha reiterado su disposición al diálogo para lograr un acuerdo con el que poner fin a la situación de paro de la que están siendo rehenes los ciudadanos de Las Palmas de Gran Canaria.

Finalmente, Emalsa ha desmentido "de manera absoluta" las acusaciones de supuestas "actuaciones irregulares de las que ha sido objeto por parte de un portavoz del comité de empresa en declaraciones a los medios de comunicación". Por ello, los servicios jurídicos de la compañía estudian "la conveniencia de llevar a los tribunales ordinarios de justicia, fuera del ámbito laboral, a quienes resulten autores de tales acusaciones difamatorias".