La ONG brasileña Davida, que lucha por el reconocimiento de la prostitución como actividad profesional, promueve desde febrero una marca de ropa muy particular: Daspu ('das putas', 'de las putas' en castellano), una firma creada por un grupo de prostitutas cariocas que en junio ya había vendido más de 5.000 prendas en Río de Janeiro.

Su objetivo de partida no era otro que combatir las enfermedades de transmisión sexual y conseguir financiación para la ONG, pero los medios nacionales se empezaron a interesar hasta darlo a conocer en medio mundo.

Desde periódico como 'Clarín' y 'Le Monde' hasta blos como 'Guarana Madrid' se han hecho eco de la noticia. Tan grande ha sido su éxito que estuvieron presentes en la feria de Prêt-â-Porter de París, desfilaron en la Bienal de Arte de Sao Paulo y preparan ya su próximo contacto con la moda, un desfile con vestidos de novia que servirá para transmitir de nuevo su menseje: "Putas y orgullosas de serlo".

El fenómeno Daspu ha sido de tal magnitud que estrellas del mundo del espectáculo, artistas e intelectuales han querido acercarse a ellas. Incluso Mick Jagger recibió un regalo de la firma en su concierto de Copacabana del 18 de febrero.