Gobierno vasco articulará un protocolo de actuación contra los desahucios con participación de la Justicia

Aburto asegura que "hay recursos" para lograr una solución, pero reconoce que el Ejecutivo "aún no ha encontrado la mejor fórmula"
El consejero vasco de Empleo, Juan Mari Aburto
El consejero vasco de Empleo, Juan Mari Aburto
EUROPA PRESS
El consejero vasco de Empleo, Juan Mari Aburto

El consejero de Empleo y Políticas Sociales del Gobierno vasco, Juan Mari Aburto, ha anunciado que el Ejecutivo presentará las próximas semanas un protocolo de actuación contra los desahucios con la intervención de la Administración de Justicia, la viceconsejería de Vivienda y los Servicios Sociales, con el objetivo de "conocer qué es lo que ocurre" alrededor de este "drama", al considerar que "del conocimiento de estos casos vendrá encontrar la solución".

El titular de Empleo ha realizado este anuncio durante el desayuno informativo del Forum Europa-Tribuna Euskadi en Bilbao, donde ha indicado que el Gobierno vasco pondrá su parque de viviendas a disposición de "este tipo de situaciones".

Aburto ha anunciado que este mismo jueves se celebrará una reunión para tratar este futuro protocolo contra los desahucios. "Hay recursos para darles solución, el problema es que no hemos encontrado la mejor fórmula para atajar estas cosas a tiempo", ha afirmado.

Además, se ha mostrado convencido de que el reciente fallecimiento de un hombre en Bilbao tras arrojarse por la ventana de su domicilio momentos antes de ser desahuciado "se podría haber evitado", aunque ha asegurado que este "trágico caso" no ha tenido "nada que ver" con el anuncio del Ejecutivo de la ampliación horaria para los trabajadores de la Administración vasca, tal como apuntaron alguna fuerzas sindicales.

"Me parece inmoral mezclar esas dos cosas", ha subrayado, para apelar a la "responsabilidad sindical" con el fin de que "no se juegue con determinadas cosas".

En este punto, ha explicado que "nadie sabía" la situación en la que se encontraba el varón fallecido en el barrio de Ibarrekolanda y ha reconocido que esa persona estuvo "tres días antes" en su despacho "cambiando las luminarias", y "nadie sabía lo que le pasaba, ni siquiera los sindicatos".

Tras calificar de "drama" el problema de los desahucios, Aburto ha señalado que "todo el mundo se está volcando con este problema", tanto las instituciones como las entidades financieras y sociales. "Hay recursos para darle solución, el problema es que no hemos encontrado la mejor fórmula para atajar estas cosas a tiempo", ha reiterado.

En este sentido, ha afirmado que su Departamento "tiene tarea" a la hora de establecer fórmulas que faciliten a los afectados los medios de ayuda necesarios "y a tiempo", algo que el Ejecutivo hará "en los próximos días".

Nueva ley de vivienda

También en el ámbito de la Vivienda, ha apelado a un "cambio de concepto" en el que las políticas de Vivienda se integren en las políticas sociales, para orientarlas a situaciones de emergencia social derivadas de la crisis. Además, ha defendido una nueva Ley de Vivienda que esté dirigida a articular el derecho a la misma, "no a su propiedad, pero sí a su uso", ha matizado.

"Ese va a ser el objeto principal de la nueva regulación", ha remarcado, tras explicar que, para ello, utilizarán el proyecto de Ley de Vivienda presentado en el Parlamento vasco la pasada legislatura "con ciertas modificaciones", para que, entre otras cosas, cuente con la participación de agentes sociales de cara a dotarla de "una mayor legitimidad".

En este sentido, ha señalado que, en la actualidad, es necesario un "cambio de sistema" que oriente las políticas de vivienda y el parque de viviendas con que cuenta el Gobierno vasco a atender esas situaciones "de vulnerabilidad" como los desahucios, realizado a través de modelos de alquiler social que, si bien supondrá un cambio cultural "muy importante y difícil" que llevará "más de dos legislaturas, a la larga, servirá para "controlar, entre otras cosas, el precio de la vivienda".

En este sentido, ha abogado por obtener "más rendimiento social" de lo ya edificado que lo que está por edificar, flexibilizando los requisitos de acceso para facilitar la ocupación, sobre todo en aquellos lugares con exceso de oferta.

Por último, ha propuesto una nueva Ley de Vivienda basado en el trabajo "anteriormente desarrollado" y ha mostrado sus intenciones de "preparar suelo" para futuras actuaciones y proponer cambios legislativos que "faciliten" la disposición de ese suelo, junto al impulso de la rehabilitación y regeneración urbana "como nicho de empleo".

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