La dirección de la empresa mixta de limpieza Limasa se ha reunido este viernes con mandos intermedios de la plantilla para reiterarles que la sociedad ha cumplido lo estipulado en el acuerdo firmado en febrero de 2012 ante el Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales de Andalucía (Sercla), a excepción de lo concerniente a la paga de enero.

Ante las críticas por parte del comité de empresa acerca del "incumplimiento" por parte de la sociedad del "90 por ciento de los acuerdos firmados" el año pasado para evitar a última hora el paro indefinido y ante la convocatoria para este sábado de una asamblea donde la plantilla decidirá si hay huelga de limpieza en Semana Santa, la dirección ha difundido una nota interna con su versión en relación con lo adoptado en 2012.

Según la empresa mixta, el acuerdo firmado en el Sercla recoge que la cantidad abonada el año pasado era un pago único y no uno a consolidar en siguientes ejercicios como defiende el comité de empresa, por lo que no corresponde su abono en enero de 2013.

Sólo este punto supone una diferencia de 1,1 millones de euros respecto a las previsiones presupuestarias que maneja Limasa para 2013, año en el que se tiene que ajustar a una disminución de seis millones de euros al haber disminuido la aportación de capital realizada por el Ayuntamiento de Málaga —el 49 por ciento del accionario es municipal y el 51 por ciento restante de los socios privados—.

Los responsables de Limasa han solicitado a estos mandos intermedios que trasladen al resto de miembros de la plantilla la información aportada y han difundido una nota interna con las principales conclusiones.

Por otro lado, el gerente de la entidad, Rafael Arjona, ha expresado este viernes al árbitro designado por el Consejo Andaluz de Relaciones Laborales (CARL) de la Junta, Jesús Cruz Villalón, para resolver el conflicto surgido a raíz de la pretensión de la sociedad de cambiar los descansos y las vacaciones de los empleados fijos para minimizar las contrataciones de eventuales, la necesidad de que dicte su laudo "lo antes posible", al objeto de "no dejar a la ciudad en una situación de indefensión".

Según ha declarado en un comunicado la dirección de Limasa, que ha trasladado al árbitro su disposición a que éste también ejerciera como mediador en la negociación del nuevo convenio colectivo, sin que finalmente se haya podido desarrollar esta función, la empresa no podría iniciar ninguna iniciativa de índole laboral si no existe un laudo. "Dejaría a la ciudad atada de pies y manos para defender sus intereses", ha manifestado.

No obstante, Cruz Villalón ha comentado este mismo viernes que el 15 de marzo es la fecha límite para emitir su dictamen, que es de obligado cumplimiento.

En la reunión de este viernes con el árbitro, la segunda para resolver el conflicto de los descansos y las vacaciones, ha vuelto a vivirse durante una hora y cuarto aproximadamente el distanciamiento entre la dirección y los trabajadores.