Para la Coordinadora de Trabajadores de Andalucía (CTA), sindicato mayoritario en Laboratorios Pérez Giménez, "resulta un poco ilusoria" la propuesta de convenio que ha presentado el accionista mayoritario y administrador único de la sociedad, Sergio Martínez, en el marco del concurso de acreedores en el que está inmersa dicha empresa farmacéutica radicada en Almodóvar del Río (Córdoba).

Así lo ha dicho, en declaraciones a Europa Press, el delegado sindical de CTA en los laboratorios, Antonio Moreno, quien ha aclarado que su sindicato aún no tiene una opinión definitiva sobre dicha propuesta, a la que ha accedido Europa Press, pues todavía no ha podido estudiar el texto de la misma, en la que se afirma que sus principales objetivos son asegurar "la continuidad de la empresa y, por tanto, el mayor número de puestos de trabajo", buscando también que todos los acreedores, cualquiera que sea su clase y naturaleza, perciban la mayor parte posible de sus créditos".

La premisa para ello, según la propuesta, es la venta de la rama productiva de la factoría a un inversor para, con el dinero obtenido, iniciar el pago de la deuda, de unos 50 millones de euros. En ese escenario, Martínez mantendría el control sobre la comercialización de medicamentos, que no sobre su producción, que corresponderá al nuevo inversor, el cual, según la propuesta, asumirá también los contratos de los trabajadores.

Ante esto, el responsable de CTA en Pérez Giménez ha destacado que la propuesta "parte de la premisa de la venta, pero si nadie compra la factoría, resulta que todo quedará en agua de borrajas" y, según ha subrayado, "no puede olvidarse" que el administrador único, "el cuento de que tiene un inversor interesado ya lo ha contado muchas veces".

En cualquier caso, según ha argumentado Moreno, aunque efectivamente se produzca la venta, "no hay prevista ninguna otra aportación económica", más allá de "los diez millones que espera lograr con la venta", que servirán "para afrontar el pago del diez por ciento" de la deuda de 50 millones, "y de los casi cinco millones de euros en créditos contra la masa", de forma que "aún quedarán 45 millones de euros que pagar en los próximos años, contando para ello solo con los ingresos que genere la mera actividad comercial".

A ello hay que sumar, por lo que ha conocido ahora el sindicalista de la propuesta de convenio, que en la misma "no se aclara si Martínez abonará los dividendos pasivos, de unos 2,7 millones de euros, que le exige que aporte la administración concursal" y que se corresponden con el valor de las acciones que le dieron el control de la sociedad.

Finalmente, según ha destacado Moreno, "tampoco se menciona el número de trabajadores que se incluirán en la cesión de contratos al supuesto nuevo inversor, es decir, si serán todos (cerca de 200) y, además, en qué condiciones", ya que conviene recordar, según ha subrayado el responsable de CTA, que ya se les deben "once nóminas" a los empleados.