Decenas de hombres mayores de 60 años de la localidad brasileña de Novo Santo Antonio, en el estado central de Mato Grosso, entusiasmados con la entrega gratuita de Viagra dispuesta por el alcalde de la ciudad. Sin embargo, el programa comunal "Pinto Alegre" (Pene Alegre en español), aprobado por la Cámara Municipal y por el que distribuye en forma gratuita el medicamento contra la disfunción eréctil, también provocó problemas en la remota localidad.
"Hay algunos 'abuelos' que ya no buscan a su viejecita. Tienen otros romances", añadió el alcalde.
Para evitar esas prácticas, en las próximas semanas el medicamento se entregará directamente a las esposas de los 68 hombres que participan en el programa.
"Con la nueva reglamentación, vamos a seguir entregando cuatro comprimidos por semana, pero en vez de a los hombres, a sus esposas. Así ellas, cuando tengan ganas, se los dan a sus maridos", concluyó De Souza Luz.
"Desde que comenzamos la entrega gratuita del estimulante sexual, nuestros mayores cambiaron. Están más contentos. Es que cuando pierden la potencia sexual, pierden el estímulo de vivir", dijo el alcalde Joao de Souza Luz en una entrevista telefónica con Reuters.
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