El Ayuntamiento de Lleida ha declarado desierto este jueves el concurso del servicio de semáforos de control de tráfico y de seguridad vial al que optaba una Unión Temporal de Empresas (UTE) en la que participaba la empresa que cobraba las multas del Ayuntamiento de Figueres,

Grs arc local, inspeccionada en la operación Pokémon en la que la justicia investiga una trama de sobornos a cambio de adjudicaciones públicas.

El Ayuntamiento ha declarado desierto el concurso al considerar que la oferta no se ajustaba a los requisitos del pliego de condiciones, una resolución en la que ha tenido en cuenta que la UTE que se había presentado al concurso, formada por Arnó-Sice (mayoritarias en un 80% del total de la UTE) y

Grs arc local, no se había constituido, circunstancia que según el consistorio impide formalizar la adjudicación.

El municipio ha anunciado el resultado del concurso en un comunicado y la convocatoria de uno nuevo para contratar el servicio con el que el equipo del alcalde Àngel Ros (PSC) pretende mejorar la seguridad vial de la ciudad, controlando el paso de semáforos y la velocidad de vehículos instalando semáforos, radares, cámaras de control de acceso y gestionando la tramitación de expedientes.

Horas antes de conocerse la decisión del Ayuntamiento, la CUP había denunciado que la única empresa que optaba al concurso era la investigada en la operación Pokémon.

La formación, sin representación en el Ayuntamiento, se ha opuesto siempre a la privatización de los servicios municipales.