La Policía ha desarticulado una red que organizaba cursos falsos de derechos humanos en Barcelona para introducir en España a ciudadanos bolivianos y paraguayos, en una operación en la que ha sido detenida la presunta coordinadora de estos cursos, y rechazados 51 ilegales en el aeropuerto de Barajas.

Los responsables de la red, liderada por María Asunción, quien desempeñaba funciones de captación, cobraban a los ilegales 1.500 dólares americanos por trasladarlos a España.

Cursos falsos

La red actuaba de la siguiente forma: varios individuos de origen español se desplazaban a diferentes países sudamericanos, como Bolivia y, una vez en estos países, creaban asociaciones fraudulentas de distinta índole con el objetivo de captar a ciudadanos que deseaban desplazarse a países de la Unión Europea y trabajar en ellos. En este caso, la organización

De este modo, pretendía introducir al grupo en España y abandonarlos a su suerte una vez conseguido su propósito.

La "coordinadora" del grupo declaró a la Policía, tras su detención, que ella era la encargada de impartir estos cursos, que tenían una duración de cinco días, en un hotel de Barcelona.

Sin embargo, esta versión fue desmentida por la dirección del establecimiento.

Los integrantes del grupo captaban el máximo número de personas para que viajasen a España, a los que ofrecían garantías de éxito y aleccionaban con antelación durante varias jornadas sobre las directrices a seguir en caso de que en la frontera fueren detenidos o interrogados por las autoridades extranjeras, así como la cantidad de dinero y otros requisitos a cumplimentar para franquear con éxito el control fronterizo.

Entrada por Barajas

Los policías del aeropuerto madrileño de Barajas comenzaron sus pesquisas el pasado día 10, cuando observaron cómo un grupo de unos 26 ciudadanos bolivianos y 25 paraguayos pretendían acceder a través del puesto fronterizo. Los extranjeros alegaron que el motivo de su viaje era asistir a un curso sobre derechos humanos que iba a impartir una mujer española, que les acompañaba, en un hotel de Barcelona.

Los agentes comenzaron a sospechar del grupo ante las contradicciones de varios de sus integrantes, que además llevaban consigo cantidades de dinero similares.

Los agentes intervinieron a los detenidos 2.650 euros, diversa documentación de la asociación y la acreditación de la detenida como embajadora de la asociación.