Cuatro meses después, las excavadoras han entrado en el jardín Chino para cambiar el pavimento, arreglar el lago, la pérgola y desmantelar los aseos públicos, para evitar que las parejas se ahorren el hotel o los yonquis se pinchen dentro. Luego, se borrarán los graffiti y se repondrán bancos.

Según las previsiones de Parques y Jardines, las obras de remodelación durarán hasta enero y costarán unos 180.000 euros.

Los patinadores que acuden al jardín a diario tendrán que esperar tres meses para volver a patinar en el parque, en contra de los vecinos, que les acusan de haber destruido el mobiliario urbano.

Los chavales dijeron ayer a 20 minutos que continuarán practicando skater allí hasta que les arreglen el pavimento de la pista del Barnés, que es muy peligroso.

Nuria Marín «No entiendo las quejas de los vecinos». Yo paso por el jardín todos los días y no veo que los skaters hagan nada malo. Pienso que son algunos vecinos quisquillosos los que se quejan. Para mí el jardín es de todos, de los skaters también.

Margot Cuña «No tienen buenas contestaciones». Los chicos que patinan en el parque en muchas ocasiones no son muy amables con los demás, no cuidan el parque y lo destrozan. Creo que deberían construirles un parque para ellos.

María Teresa López. «Son chavales que quieren patinar y no tienen ningún sitio» Las dos partes tienen razón, pero si siguen así, nunca solucionarán el problema. Esto no sucedería si hubiera una buena pista de patinaje para los chavales por esta zona.