El Prat vivió ayer una situación insólita cuando se produjo el inesperado aterrizaje de emergencia de una aeronave de la compañía holandesa KLM. La causa fue la indisposición que sufrió uno de los pasajeros que, en pleno vuelo, empezó a vomitar bolas llenas de cocaína. Se trataba del ghanés Moubaou S., de 37 años, llevaba en el estómago 96 bolas (1.798 gramos de coca) y fue operado de urgencia en el hospital de Bellvitge bajo la custodia de la Guardia Civil.Por su parte, los usuarios del aeropuerto de Barcelona se han incrementado un 10,4% en 2006 (con más de 25 millones de pasajeros) respecto al mismo periodo de 2005. Aena informó ayer que en el mes de octubre circularon por el aeropuerto 2,7 millones de viajeros.