La agencia de medición de riesgos Fitch ha mantenido la calificación 'BBB' a Caja Laboral Ipar Kutxa, entidad que ha valorado esta nota tras la culminación del proceso de integración con Ipar Kutxa y el inicio del nuevo proyecto cooperativo.

De esta manera, Caja Laboral Ipar Kutxa se ha referido en un comunicado a la asignación de la calificación 'BBB' con perspectiva negativa a la cooperativa de crédito vasca.

La entidad ha destacado que Fitch ha valorado la situación de Caja Laboral Ipar Kutxa y ha subrayado que en un entorno en el que otras entidades financieras están sufriendo "valoraciones" a la baja, en su caso, el rating se mantiene en BBB y se les otorga "la máxima categoría posible para una entidad del Estado, que cuenta también con un rating BBB".

Los pilares sobre los que Fitch sustenta la calificación de Caja Laboral Ipar Kutxa, hacen referencia a la fuerte capitalización con la que cuenta la entidad y a la fortaleza individual y capacidad de generación de recursos contrastada de la misma.

Además, según ha explicado Caja Laboral, los argumentos que utiliza Fitch para mantener su rating se resumen en cuestiones como que las duplicidades que pueden surgir de la fusión "no comprometen de forma significativa la rentabilidad de la nueva entidad".

Asimismo, considera que la estructura de financiación es "muy adecuada" y que en los próximos dos años "no hay grandes vencimientos". Respecto a morosidad, cree que es "más contenida" que en sus principales competidores y, respecto a solvencia, destaca su "fuerte capitalización", ya que se espera que el ratio de capital se mantenga alrededor del 10 por ciento al final de 2012. A ello, se une una "buena posición" de liquidez.

La entidad ha resaltado que cumple con todos los "requerimientos de solvencia", al contar con un nivel de Capital Principal superior al 10 por ciento, después de hacer frente a los requerimientos de los reales decretos, frente al 9 por ciento exigible. Además, ha subrayado que la tasa de morosidad cercana al 7 por ciento es tres puntos inferior a la media del sector bancario.

A su juicio, estos datos confirman "la buena posición de partida del nuevo proyecto cooperativo, para afrontar escenarios de estrés" con condiciones económicas especialmente "adversas", demostrando la capacidad para "disponer de buenos ratios de solvencia, liquidez, eficiencia y morosidad".