Las negociaciones entre la Unión Europea y Marruecos para cerrar un acuerdo pesquero mantienen a la expectativa a una docena de barcos con tripulación gallega, en torno a seis palangreros de Ribeira de los que ya faenaron en esas aguas —de bandera mixta— y otros "seis u ocho" arrastreros que fueron expulsados del caladero mauritano.

En el caso de estos últimos, la posibilidad de su entrada en Marruecos pasa porque resulten "unas buenas condiciones técnicas" y se apruebe la categoría 4, de pesca de profundidad —superior a los 200 metros—, por lo que "en ningún caso se dedicarían al cefalópodo", según explica a Europa Press el presidente de Cepesca, Javier Garat.

Las especies que capturarían serían, por tanto, "un misterio", ya que se trata de una pesquería "nueva" y la actividad sería "exploratoria", explica. Con todo, Garat destaca que "la prioridad" de esta flota sigue siendo la renegociación del protocolo con Mauritania para volver a capturar pulpo, ya que sostiene que el estado del recurso es mejor que el que dictaminaron las autoridades.

En cuanto a los buques de palangre, el responsable de Cepesca apunta que en su día hubo "hasta 11" licencias en Marruecos de la flota de Orpal (organización de palangreros de Ribeira), pero, ahora, los "interesados" son "pocos", una media docena.

Calendario de reuniones

El diálogo entre Bruselas y Rabat prevé que se mantengan reuniones este miércoles, el jueves y el viernes. Cepesca recibirá nueva información este jueves, y, aunque considera que en una negociación puede pasar "cualquier cosa", por las declaraciones del ministro Miguel Arias Cañete cree que los encuentros acabarán por "atar las condiciones técnicas y económicas" con el propósito de poder rubricar el pacto en una nueva ronda.

En cuanto a la nueva negociación con Mauritania, está prevista la celebración de una comisión mixta —entre representantes de aquel país y de la UE— los días 19 y 20 de febrero en París. Previamente, la Comisión Europea ha convocado al sector el día 7 de febrero para preparar el comité científico —todavía sin fecha— en el que pretenderá demostrar que el stock de pulpo y marisco en el caladero mauritano permite su explotación.

"Tenemos la esperanza de que se puedan corregir los fallos del acuerdo que hay en la actualidad para que nos permita faenar a la flota española marisquera y cefalopodera", resalta Javier Garat.