El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Antonio Silván, ha confirmado que uno de los lobos abatidos recientemente en los Picos de Europa había sido objeto de seguimiento científico, pero se encontraba dentro del cupo de ejemplares autorizados para su caza, aunque se ha abierto una investigación.

Silván, que este lunes ha presentado el nuevo geoportal de la Junta, ha recordado que el lobo es objeto de un cupo determinado para el control de la especie, y en este caso efectivamente obedecía a un animal que llevaba un control, algo que ha provocado las críticas de asociaciones ecologistas y animalistas por las dudas sobre la legalidad de la autorización.

Por otro lado, en cuanto a la declaración de la provincia de Ávila como "libre de lobos", una propuesta de UPA aprobada en al Diputación Provincial este lunes con el apoyo de PP y PSOE, el consejero ha recordado que la Junta trata de buscar la compatibilidad de la actividad ganadera con la conservación de la especie.

Antonio Silván ha explicado que es el equilibrio en el que se mueve la actuación de la Junta y ha recordado que el régimen jurídico del lobo es "doble" —es especie cinegética al norte del Duero y no al sur—, algo que "dificulta mucho más" todo tipo de actuaciones que al respecto se realicen.

A este respecto, ha incidido en que se ha instado a la Comisión Europea, a través del Ministerio, a unificar ese régimen, algo en lo que se trabaja.

En cualquier caso, ha trasladado a los titulares de explotaciones ganaderas y sus titulares "el máximo apoyo" y se ha comprometido a "trabajar todos juntos".