Veintidós provincias de once comunidades están este lunes en alerta naranja o amarilla por aludes, deshielos, vientos y/o temporales costeros, con especial incidencia en el noroeste peninsular, informa la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en su página web.

En Cantabria hay alerta naranja (riesgo importante) por mar de fondo del noroeste y olas de 5 a 6 metros disminuyendo durante la tarde a 4 metros y en Asturias hay también alerta naranja por temporal costero con mar de fondo del noroeste y olas de 5 a 6 metros disminuyendo durante la tarde.

Galicia mantiene la alerta naranja por fenómenos costeros en las provincias de A Coruña, Lugo y Pontevedra con mar de fondo del noroeste y olas entre 5 y 6 metros disminuyendo durante la tarde a 4 metros, y en el País Vasco está activada la alerta naranja por vientos costeros en Vizcaya y Guipúzcoa.

En Cataluña hay alerta naranja por fenómenos costeros en Girona y por viento en Tarragona, y alerta amarilla (riesgo) por aludes en el Pirineo leridano y Valle de Arán; en Aragón se mantiene la alerta amarilla por viento, riesgo de aludes y deshielos en el Pirineo oscense.

Las Islas Baleares y la Comunidad Valenciana están en alerta naranja o amarilla por vientos y/o fenómenos costeros.

Andalucía, Murcia y Melilla continúan en alerta amarilla por vientos y en Navarra, el aviso amarillo por viento, riesgo de aludes y deshielos afecta al área de los Pirineos.

La Aemet avisa de que con la alerta naranja existe un riesgo meteorológico importante, fenómenos meteorológicos no habituales y con cierto grado de peligro para las actividades usuales, y con la amarilla no existe riesgo meteorológico para la población en general, aunque sí para alguna actividad concreta.

Entre veinte y treinta residentes de una urbanización de Calpe (Alicante) han sido desalojados la pasada madrugada a causa de un incendio originado después de que el fuerte viento provocara la caída de una torre del tendido eléctrico.

Según fuentes policiales y el Centro de Emergencias de la Generalitat Valenciana, todo comenzó a las 02.40 horas en la urbanización Marivillas cuando, según los indicios, el viento causó una chispa y derribó la torre del tendido eléctrico.

Esto hizo que se incendiara una vivienda y que el fuego se extendiera a tres más, lo que obligó al desalojo de entre 20 y 30 vecinos, de los cuales 15 han sido realojados en el Hotel Esmeralda.

El fuego avanza ahora hacia el paraje del Morro de Toix sobre una zona de matorral y monte bajo y, según Emergencias, trabajan en la extinción dos helicópteros, dos brigadas, cuatro autobombas y nueve dotaciones de bomberos, entre otros efectivos.