La Executiva del BNG llevará este sábado a la reunión del Consello Nacional la propuesta de celebrar los días 16 y 17 de marzo la asamblea nacional de carácter extraordinario tras el debate previo que se abrió en las comarcas y que, por primera vez en el seno de la formación frentista, se abrió a la ciudadanía para que grupos simpatizantes pudiesen participar y aportar propuestas.

Este proceso, como ha recordado en declaraciones a Europa Press el portavoz nacional del BNG, Guillerme Vázquez, ha supuesto un proceso "de reflexión y debate" para iniciar un "nuevo proyecto para la sociedad".

"Podíamos definirlo como (proceso) para reorientar el BNG en la nueva situación social o política", ha manifestado Guillerme Vázquez, quien ha explicado, asimismo, que el proceso incluyó un debate "en las comarcas". Allí, se recogieron propuestas y se elaboró un documento de síntesis, que se volvió a debatir y que todavía ha contado con más aportaciones en este tiempo.

Como ha asegurado Guillerme Vázquez a Europa Press, a este proceso que termina tras incorporar al debate "círculos cercanos al BNG", le sucede ahora la "etapa definitiva", con la convocatoria de la asamblea, en la que se "elaborarán documentos y propuestas" antes del plenario.

Así las cosas, según las fuentes consultadas por Europa Press, la Executiva del BNG propondrá este sábado ante el Consello Nacional —máximo órgano de decisión entre asambleas—, la fecha del 16 y 17 como horizonte del calendario asambleario que tendrá que fijarse este sábado. A mayores, también se discutirá una propuesta de reglamento.

Soberanía e idioma

Como es habitual en el Consello Nacional, el portavoz nacional llevará al máximo órgano de dirección un informe de gestión, en el que abundará en la necesidad de lograr mayor soberanía para Galicia, así como también abordará la cuestión lingüística, justamente un día antes de que el BNG muestre en la calle su apoyo a la manifestación convocada por la plataforma 'Queremos Galego'.

La Executiva del BNG propone abordar "de forma prioritaria" la creación de una plataforma cuyo "objetivo esencial sea la reivindicación del derecho de Galicia a decidir". En esta línea, el Bloque se fijará en el calendario político próximo, la reactivación de la "actividad internacional", intensificando las relaciones y trasladando por esta vía también el debate social a las alternativas a la situación económica y la defensa de la soberanía de los pueblos de forma interrelacionada.

En el documento de gestión del BNG, al que ha tenido acceso Europa Press, la formación frentista considera que Galicia "tiene que dejar de verse atrapada", para lo que precisa "ejercer la soberanía de forma consciente, decidir ampliamente, particularmente en un momento de cambios profundos como los que se están produciendo".

La soberanía ya ha centrado de forma creciente el discurso de los nacionalistas gallegos en el último año y, de hecho, fue el eje central de la campaña para las últimas elecciones gallegas, en las que el BNG, con siete diputados —cinco menos que en la anterior legislatura—, se situó como cuarta fuerza política.

Las relaciones con otras fuerzas del Estado que comparten la idea soberanista también se han reforzado en los últimos tiempos y, recientemente, el propio Guillerme Vázquez se reunió con el responsable de la Izquierda Abertzale de Relaciones Internacionales, Niko Moreno, quien ha animado a un procedimiento independentista en Galicia.

En este marco de relaciones, la formación frentista también organizará para mediados del mes de febrero una reunión de la Alianza Libre Europea (AGE), grupo en la que está integrado el BNG con su eurodiputada Ana Miranda a la cabeza.

Documento sobre el futuro

Paralelamente, la UPG —formación hegemónica del BNG— debatió hace una semana un documento político en el que marca posición política sobre el futuro del nacionalismo, y también expresa su opinión sobre qué carácter organizativo debe tener el BNG.

Sobre el soberanismo, la UPG incluyó en su texto la necesidad de, en el ámbito del Estado, "priorizar la relación con EH Bildu y ERC, incluso concretando alianzas fuera de las citas rituales y, en especial, buscando fórmulas de colaboración electoral de cara a las próximas elecciones europeas".

Acerca de este aspecto, y en el texto que el Bloque ha recopilado en el preasambleario, se constaba que muchos militantes proponían que el BNG "tomase la iniciativa de articular, cuanto antes, una coalición de organizaciones soberanistas y de izquierda de las naciones sin estado para concurrir a las elecciones europeas". Con todo, sobre este extremo Guillerme Vázquez ha asegurado, en días pasados, que se abordará "en su momento".

Al margen de esta cuestión, los nacionalistas gallegos afrontan su segunda asamblea nacional en un año después de las escisiones tras el cónclave de Amio, en enero de 2012, y en la que se produjo una fractura en dos grandes ramas, la que derivó en la conformación de Compromiso por Galicia y la que fructificó en Anova-Irmandade Nacionalista, ahora en el Parlamento de Galicia tras aliarse con Esquerda Unida-Izquierda Unida.