El consejero de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Urbanismo de Cantabria, Javier Fernández, ha manifestado que le "gustaría" acabar la presente Legislatura con el problema de las viviendas con sentencia de derribo "prácticamente resuelto".

Ha detallado al respecto que el asunto no se va a solucionar este año, sino que los "frutos" de las acciones puestas en marcha por el Ejecutivo, como el Plan de Derribos, se van a empezar a ver en 2014, de modo que para 2015 confía en que las familias tengan "mayoritariamente" legalizadas sus viviendas. No obstante, ha recordado que en algunos casos no quedará "más remedio" que la demolición de lo construido.

Así lo ha dicho en una entrevista concedida a RNE, recogida por Europa Press, en la que ha recordado que la legalización directa "únicamente" se puede aplicar a cuatro casos concretos, proceso que se está tramitando en la actualidad, mientras que la mayor parte de los supuestos es preciso cambiar los planes urbanísticos, extremo en el que también se está trabajando.

En este sentido, Fernández ha señalado que antes de legalizar estas viviendas, hay que aprobar otros planeamientos urbanísticos en base a los cuales pedir nuevas licencias, lo que "lleva tiempo". En cualquier caso, ha trasladado a los afectados por sentencias de derribo —que pesan sobre unas 600 viviendas en la región, concentradas en su mayor parte en municipios costeros— el "compromiso firme" del Gobierno regional de "seguir con tesón" y "sin bajar la guardia ni un minuto" las modificaciones urbanísticas necesarias que permitan la legalización de viviendas.

Tras recordar que ya se avisó a los afectados que las soluciones a su problema no iban a ser algo "inmediato", sino "a medio plazo", el consejero ha subrayado que se están desarrollando comisiones "casi mes a mes" en los casos de Cerrias, Argoños y La Arena, que son "el núcleo duro" de las sentencias de demolición y que, en este último caso, "no hay otra alternativa" que el derribo.

Aún así, ve "absolutamente comprensible" que los afectados no estén satisfechos, pues tienen un problema "desde hace muchos años" y la solución "tarda en llegar". Es "lógico", ha dicho, que "cunda el desánimo".

También considera "habitual" en materia de derecho que sentencias que son firme no se lleguen a ejecutar cuando cambia la situación o las circunstancias, como ocurre con las viviendas condenadas a derribo si se modifican los planes urbanísticos.

"No tiene sentido demoler una vivienda donde luego se va a poder construir la misma vivienda", ha sentenciado el consejero, para quien sería algo "absurdo".

Alto del cuco

El titular de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Urbanismo también se ha referido a la situación del Alto del Cuco, en Piélagos, para la que confía en buscar una salida "lógica".

Según ha asegurado, se está trabajando en dar una solución al problema, con los propietarios de las viviendas, el Ayuntamiento y la Consejería de Ganadería, porque también influye el PORN (Plan de Ordenación de los Recursos Naturales) de las Dunas de Liencres.

El objetivo es hallar una salida que "respete" este monte, ya que su recuperación es "vital", al tiempo que se busca solucionar el problema urbanístico de las viviendas construidas. "Soy muy optimista. Se puede encontrar una solución", ha manifestado al respecto.

LEYES

En otro orden de cosas, el consejero se ha referido a las leyes que se están impulsando desde su departamento, como la Ley del Paisaje o la que regula los Proyectos Singulares de Interés Regional (PSIR), así como la reforma de la Ley del Suelo que va a permitir agilizar planeamientos urbanísticos y dinamizar esta actividad como "motor" de la economía.

Además, este mes o el próximo empezará a "ver la luz" una nueva ley de abastecimiento y saneamiento de agua, que se acompañará de un plan hidráulico que va a poner "orden" en futuras actuaciones e inversiones en la materia.

INVERSIONES

En cuanto a las inversiones de la Consejería, Medio Ambiente ha indicado que pese al "esfuerzo" de austeridad y control del déficit, se va a intentar "mantener" el nivel inversor por una "doble vía": las cuantías previstas en los presupuestos regionales de este año y con las "promesas" del Estado, que Fernández tiene "mucha ilusión" en que se concreten este año, especialmente en materia hidráulica.

Ha recordado que está en marcha una financiación que espera que se concrete en enero o "como mucho" en febrero de 17 millones de euros para la Autovía del Agua, a los que se sumarían casi 50 millones de los Fondos de Cohesión para grandes saneamientos.

Se trata de una inversión "potentísima" que, si no "se arranca del Estado", el Gobierno regional recurrirá a la financiación del Banco Europeo de Inversiones.

BITRASVASE

En cuanto al Bitrasvase del Ebro, cuyo coste rondó al año pasado los 4 millones de euros, Fernández se ha referido al compromiso del Ministerio de que esta devolución de agua al pantano no suponga coste alguno para Cantabria, ya que se genera en la propia región y, además, el pantano se construyó sobre pueblos de la Comunidad, extremos que tienen que tener una "compensación".

En este sentido, ha reiterado la postura del Ejecutivo autonómico de que, en vez de bitrasvase, se plantee un trasvase, para que no haya que retornar al pantano el agua que se precise en el resto de la región o, en caso contrario, que ese coste no caiga "sobre los hombros" de Cantabria. Ha recordado que se ha aplazado la devolución del agua hasta el año 2016, para cuando el consejero confía que haya una "fórmula" que "compense" a la comarca del Ebro y al resto de Cantabria.

Sensibilización medioambiental

Finalmente, Fernández ha aludido a las iniciativas puestas en marcha en materia de concienciación y sensibilización medioambiental, como el Plan Provoca, en cuyo programa han participado este año once asociaciones y colectivos.

Sobre este asunto, ha opinado que "la mejor forma de educación ambiental" es precisamente "poner al ciudadano en contacto con la naturaleza y el medio ambiente".

También se ha referido al programa de regeneración ambiental de áreas degradadas en la región que se está llevando a cabo en colaboración con los ayuntamientos, y que consiste en hacer un "inventario de puntos negros" para convertirlos en "puntos verdes".

Paralelamente se va a desarrollar el plan regional de actuaciones por comarcas, entre las que ha destacado la del Besaya, en la que se van a plantear actuaciones especiales este año y el próximo, y a las que se sumarán el Plan Besaya 20-20-20, y la de Campoo, donde hay que potenciar sus "espectaculares" valores ambientales que han de servir de "motor" para dinamizar la comarca.