El Partido Popular de Ávila ha negado la existencia de sobresueldos en su formación, ha defendido la legalidad de sus actuaciones, a la vez que rechaza "cualquier atisbo de corrupción, sea del tipo que sea" y que "pague quien haya cometido delito".

Los 'populares' abulenses, a través de un comunicado recogido por Europa Press, expresan su "total indignación" ante el presunto caso de corrupción en el PP, aseguran que "no se ha producido ningún caso" en su formación y se reservan acciones legales hacia "cualquier tipo de declaración, proceda de donde proceda, y deje en el ambiente cualquier género de dudas sobre cualquier dirigente del PP de Ávila".

Tras señalar que "hay mucha gente en política que trabaja por el interés general" con "bien, honradez, honestidad y esfuerzo", piden que se investigue "hasta el final" y "con la mayor agilidad posible" para que "pague quien haya cometido delito que se haya constatado mediante el correspondiente proceso judicial".

Sobre el caso denunciado solicitan que se investigue "hasta el final con la mayor agilidad posible", y subrayan que todos los sueldos y gastos de representación que se pagan en el PP "se declaran a Hacienda y se cobran de acuerdo a la legalidad".

Autoría del tribunal de cuentas

"La contabilidad del Partido Popular, tanto en ingresos como en gastos, es clara, transparente, diáfana y normal, y está auditada favorablemente por el Tribunal de Cuentas".

La reacción del PP es en respuesta al comunicado emitido por UGT, que pedía explicaciones sobre los cobros irregulares y recordaba que el abulense Ángel Acebes fue coordinador y secretario del partido y los diputados Sebastián González secretario de Organización y Pablo Casado parte de la dirección nacional.

Por ello, UGT quiere que el presidente provincial, Antolín Sanz, aclare "si las sospechas que afectan a quienes formaron parte del aparato del PP se disipan en el caso de Acebes, González y Casado y, por tanto, y si sus cuentas con el fisco y con la sociedad abulense y española son transparentes.