El expresidente del Gobierno de Navarra Miguel Sanz ha afirmado que si la presidenta del Ejecutivo y de UPN, Yolanda Barcina, y el secretario general del PSN, Roberto Jiménez, tienen "voluntad de acuerdo y capacidad de ceder algo por parte de los dos, se podrán sacar adelante acuerdos que están demandando los ciudadanos".

Sanz, en una entrevista concedida a Onda Cero y recogida por Europa Press, ha manifestado que no cree que haya que quitar "a ninguno" de los dos dirigentes políticos de "en medio" para facilitar un entendimiento UPN-PSN.

"No creo que haya que quitar a ninguno de en medio, si alguien piensa eso, está situándose fuera del lugar apropiado, porque cada uno en cada partido toma las decisiones en los órganos correspondientes, nadie del PSN puede decir que se quite de en medio la presidenta de UPN, ni nadie de UPN puede decir que se quite de en medio Roberto Jiménez del PSN", ha añadido.

Preguntado sobre si estaría dispuesto a "mediar" entre Barcina y Jiménez para permitir acuerdos, ha afirmado que está "siempre disponible", pero ha precisado que no se va a presentar "voluntariamente". "Si a mi se me requiere, estoy dispuesto, por el interés de Navarra y por el de mi partido", ha afirmado.

Sobre el Congreso que va a celebrar UPN, Sanz ha dicho que no tiene "nada que decir al respecto, más allá de contribuir desde mi aportación personal a que la decisión que se adopte sea la mejor para los militantes y votantes de UPN". "Y para que sea la mejor, tiene que ser consensuada entre las partes, aceptada entre las partes, sea cual sea, sea a favor de la bicefalia o no, tiene que ser absolutamente consensuada", ha indicado.

No obstante, ha dicho que no ve "mal" una opción que pase por la renovación de Barcina en la Presidencia y dar poder ejecutivo al cargo de vicepresidente. "El partido necesita un revulsivo y un nuevo impulso", ha sostenido.

Preguntado expresamente sobre si quiere que Barcina siga al frente del Gobierno y del partido, ha dicho que no tiene "ningún inconveniente, es más, pienso que es bueno que sea la misma presidenta, pero también considero que es bueno que UPN dé un nuevo impulso adelante y exista en el partido una mayor relación e implicación con los afiliados, con la base social, que hoy está de alguna manera distanciada o desilusionada en algunos aspectos, e indudablemente tiene mucho que ver con la actual situación económica y social que atraviesa Navarra".