El presidente del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Valladolid, Óscar Puente, ha rescatado el tema del derribo de dos fachadas protegidas de la calle Labradores que tuvo lugar en el año 2009 al objeto de exigir al Ayuntamiento que cobre las sanciones de 2.4000.000 euros que en su día se impusieron a la empresa titular del inmueble y a la dirección técnica de las obras.

"Cuatro años después del derribo, el Consistorio parece dispuesto tanto a perder una gran cantidad de dinero como a ofrecer a la ciudadanía un espectáculo lamentable en relación con los temas urbanísticos de esta ciudad, donde parece que cualquiera puede hacer lo que quiera si es alguien importante o se mueve en los entresijos del poder económico", ha asegurado Puente tras explicar que este asunto debería considerarse "una segunda parte del pleno municipal de este miércoles", cuando los socialistas presentaron ante la Junta de Portavoces una interpelación cuyo debate fue rechazado por el alcalde "con la excusa de que era un tema excesivamente concreto".

Los inmuebles 37 y 39 de la calle Labradores estaban protegidos con catalogación P4, perteneciente a los edificios de ladrillo construidos en la primera mitad del siglo pasado. Sin embargo, la grúa que realizó los trabajos derribó las fachadas "a plena luz del día, con cortes de tráfico realizado desde el propio Consistorio y ante una nutrida presencia de la policía municipal".

Las fachadas en cuestión debían ser conservadas en su integridad como ordenaba el Ayuntamiento a través del decreto en el que se autorizaba el derribo parcial. Sin embargo, al no respetarse este punto el PSOE de Valladolid reaccionó "de forma más que airada y absolutamente justificada, lo que hizo que desde la Casa Consistorial se anunciase a bombo y platillo que se impondrían sanciones ejemplares".

Esas sanciones se cifraron en más de dos millones, 1.200.000 euros a la empresa titular del inmueble y 1.200.000 euros a la dirección técnica de obra. A día de hoy, sin embargo, el Consistorio no ha recibido "ni un céntimo".

"No se ha cobrado el dinero de los arquitectos porque éstos han ganado el procedimiento judicial que iniciaron contra la imposición de las sanciones. Y si lo ganaron fue por vicios de forma en el procedimiento sancionador, lo que demuestra que una vez más el Ayuntamiento tramitó de forma chapucera un asunto importante", ha detallado Óscar Puente tras mostrar su "incredulidad" por el hecho de que no se haya recurrido esta sentencia.

En el caso de la cantidad de 1.200.000 euros impuesta como multa a la empresa titular del inmueble, los socialistas consideran la situación "mucho más grave". "Ahí el Ayuntamiento no ha cobrado porque no ha querido", ha criticado el presidente del Grupo Municipal Socialista al matizar que la mencionada empresa recurrió ante la vía contencioso-administrativa y solicitó una suspensión de la sanción que jamás llegó a otorgarse.

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Golpe de látigo'

Con fecha 12 de noviembre de 2012 los socialistas se interesaron por este asunto y formularon la correspondiente pregunta ante la Comisión de Hacienda Pública. La respuesta desde el Ayuntamiento, que llegó el pasado 14 de noviembre, fue: se ha comunicado a la sociedad sancionada que no ha presentado la garantía requerida, por lo que se ha levantado la suspensión del procedimiento cobratorio.

"Así, una vez más, el gobierno municipal ha demostrado que actúa a golpe del látigo de la oposición, que hace falta el interés del PSOE para que el PP mueva ficha", ha opinado Puente.

Para finalizar sus declaraciones, el secretario general de la agrupación socialista de Valladolid ha dejado en el aire dos preguntas: "¿Con los ciudadanos de a pie también se espera cuatro años para cobrar una multa?", y "¿Cómo se puede dejar de cobrar 2.400.000 euros ante la actual situación económica y simplemente por estar de brazos cruzados?"