El departamento de Hacienda y Finanzas de la Diputación de Gipuzkoa ha respondido a las críticas de Adegi al nuevo Impuesto sobre la Riqueza y las Grandes Fortunas (IRGF), que considera va en contra de la cultura empresarial guipuzcoana, asegurando que el nuevo gravamen "incentiva la inversión productiva".

En un comunicado, la Diputación guipuzcoana ha opinado que la patronal guipuzcoana "se equivoca al valorar el modo en que grava la riqueza" el nuevo gravamen aprobado por las Juntas guipuzcoanas.

En este sentido, ha destacado que con el IRGF los empresarios que inviertan en su empresa pagarán "un máximo de un 0,25 por ciento por la riqueza que inviertan en la misma", mientras que aquellos que inviertan en activos financieros "tendrán que pagar un máximo de un uno por ciento, es decir, cuatro veces más".

La institución foral ha señalado que aunque Adegi sostiene que se "verá penalizado y pagará más un empresario que haya apostado por capitalizar más su empresa, que una persona que hubiera invertido ese capital en activos financieros", la realidad "es justo la contraria".

Al respecto ha asegurado que el nuevo impuesto "incentiva la inversión en activos productivos, instalaciones y maquinaria frente a otro tipo de inversiones, al estar las primeras bonificadas en un 75 por ciento y, por lo tanto, menos gravadas que las inversiones en activos inmobiliarios o financieros", lo que supone "un aliciente para que los empresarios de Gipuzkoa inviertan en sus empresas, fortalezcan los fondos propios de las mismas, creen empleo y riqueza en el territorio".

Por ello ha defendido que el IRGF "grava la riqueza de las personas y no a las empresas, dando además un tratamiento privilegiado a las inversiones empresariales por medio de una bonificación muy generosa".

Finalmente, ha destacado que este nuevo impuesto "supone un cambio de dirección apartando las políticas fiscales neoliberales que a partir del año 1993 con el establecimiento de la exención a los útiles de trabajo abrieron el camino para que las participaciones empresariales no pagaran nada".