Los padres y madres del colegio público Luis Vives de Valencia ya no pueden más. La caída del segundo falso techo, en esta ocasión en un baño, en apenas tres semanas ha colmado su paciencia y han optado por pasar a la acción.

Según confirmaron fuentes del AMPA a 20 minutos, sus miembros iniciaron ayer una votación electrónica con dos puntos concretos: denunciar el estado del centro y lo que consideran una falta de control sobre el mismo ante la Fiscalía de Menores de Valencia y, además, ante el Síndic de Greuges, el defensor del pueblo valenciano.

El pasado viernes se vino abajo la talla de escayola del baño femenino de Primaria y el 23 de noviembre el falso techo de un aula. En ambas ocasiones fue un viernes por la noche, sin alumnos, pero la comunidad escolar está alarmada por el estado del centro, que tiene más de 100 años y requiere, según informes técnicos encargados por el AMPA, mejoras urgentes en sus instalaciones. El Ayuntamiento de Valencia, encargado de hacerlas, apunta a una acumulación de escombros como causa, aunque mantiene abierta la investigación.  El edil de Educación, Emilio Del Toro, dijo que la Conselleria de Educación, en las inspecciones que ha realizado recientemente por un hecho similar, comprobó que el edificio del colegio “no tiene problemas estructurales”.

El presidente del AMPA, Félix Crespo, indica que la denuncia judicial iría “contra las personas que decían que era habitable sin haber hecho las comprobaciones y que son responsables de la seguridad de nuestros hijos menores”. Según explicó, los Bomberos municipales “sí hicieron una valoración y ahora nos hemos creído que no hay peligro”.

Crespo añadió que en este momento se están “asesorando” en el plano legal para interponer las acciones legales que decidan. Otras fuentes del AMPA explicaron que una mayoría clara de los padres se inclinan “por poner la denuncia ya”.

El último mes ha registrado otro hecho similar. Fue en Alzira, el pasado 3 de diciembre,  cuando tres adolescentes de un módulo de jardinería del instituto Rei Jaume I resultaron heridos al desplomarse un techo al que se habían subido.

El sindicato CSI·F ha instado a la Conselleria de Educación a que elabore un plan de revisión “urgente” de instalaciones con los ayuntamientos para garantizar la seguridad de los centros educativos. El objetivo con esta iniciativa consiste en evitar percances como los ocurridos en las últimas semanas con el desplome de techos en colegios. Según la central sindical, la Generalitat adeuda a los institutos los gastos de funcionamiento desde abril.