Ocho petroleras trasnacionales firmaron el domingo nuevo contrato para operaciones de explotación y exploración en Bolivia, justo después de vencer el plazo fijado por la nacionalización dictada por el gobierno de Evo Morales.

Las ocho compañías, entre ellas la hispano-argentina Repsol YPF y la brasileña Petrobras, se sumaron a la franco-belga TotalFinaElf y la estadounidense Vintage, que firmaron el viernes.

Los acuerdos fueron firmados por el titular de la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Juan Carlos Ortiz, en un acto al que asistió el presidente Morales y otras altas autoridades del país.

"Se va respetar lo que siempre han pedido, la seguridad jurídica" y "jamás vamos a violar estos contratos transparentes", dijo el gobernante, acompañado del vicepresidente, Alvaro García Linera, y de varios ministros de su gabinete.

De la ceremonia, celebrada minutos después de la medianoche boliviana, participó el secretario de Estado español de Asuntos Exteriores, Bernardino León, que llegó el sábado a La Paz expresamente para la fase final de las tratativas de Repsol YPF con las autoridades.

Morales afirmó que España "es un socio estratégico" para Bolivia y que el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero "es una garantía y una esperanza para que Europa nos pueda abrir las puertas".

Sostuvo que Brasil es "el líder de la región" y que, además, "estos acuerdos nos permiten fortalecer las relaciones" y la integración entre ambos pueblos.

En el acto, además, firmaron el pacto las argentinas Matpetrol y Pluspetrol; British Gas; Repsol y su filial Andina, la Empresa Petrolera Chaco, perteneciente al grupo British Petroleum.