El Museo Bellas Artes de Bilbao incorpora la obra 'Lucrecia' de Carnach el Viejo, exponente del renacimiento alemán

Su precio ha sido de 1.400.000 euros, abonados gracias al fondo de adquisiciones dotado por BBVA para la compra de obras de arte
Adquisición del Museo de Bellas Artes
Adquisición del Museo de Bellas Artes
MUSEO DE BELLAS ARTES
Adquisición del Museo de Bellas Artes

El Museo de Bellas Artes de Bilbao ha incorporado a su colección, gracias a la colaboración de la Fundación BBVA, 'Lucrecia', una obra destacada de Lucas Cranach El Viejo, considerado como uno de los pintores señalados de la historia del arte y reconocido protagonista, junto con Alberto Durero, del Renacimiento alemán.

La obra, pintada en 1534 por el artista germano, procede de una colección particular madrileña y su precio ha sido de 1.400.000 euros, abonados gracias al fondo de adquisiciones dotado por BBVA para la compra de obras de arte.

Este fondo, que desde 2002 permite una gestión estable para el enriquecimiento de la colección del museo, ha sido recientemente renovado por un valor de 2,1 millones de euros a siete años, periodo en el que las instituciones fundadoras del museo devolverán el principal, mientras que la Fundación BBVA, en calidad de patrono de la Fundación Museo de Bellas Artes de Bilbao, se hará cargo de los intereses.

La renovación del acuerdo entre el museo y la Fundación BBVA, y la aparición de una obra "tan destacada" de una de las personalidades artísticas "más importantes" de toda la historia del arte occidental, han constituido una "ocasión única" para este incremento cualitativo del patrimonio artístico de la colección de pintura antigua del museo, según informan desde el propio centro.

Por ello, desde el Museo consideran que esta oportunidad "permite añadir una pintura destacada" de un artista hasta ahora no representado en la selección de obras maestras de la colección del museo. Además, añaden, viene a enriquecer "sustancialmente" la representación de los pintores del Renacimiento del norte de Europa, que cuenta con ejemplos relevantes de primitivos flamencos y holandeses coetáneos al alemán Cranach.

A su juicio, para situar la compra de esta obra autógrafa de Lucas Cranach el Viejo se debe examinar otras dos adquisiciones recientes de obras de este pintor: en marzo de 2010 David y Betsabé (1534) se vendió por 5,3 millones de euros a un coleccionista privado en la feria de arte y antigüedades de la ciudad holandesa de Maastricht y en diciembre de ese mismo año el Museo del Louvre adquirió por 4 millones de euros 'Las tres Gracias' (1531).

'Lucrecia', fechada en 1534 y firmada con el anagrama del pintor (una serpiente alada), es un óleo sobre madera de haya de 50,8 x 35,8 centímetros (cm), que ha pertenecido durante generaciones a una colección española.

Se trata de la familia del marqués de Rafal, exiliado en Viena a comienzos del siglo XVIII por dirigir el levantamiento de Orihuela a favor del archiduque Carlos durante la Guerra de Sucesión (1701-1713). Amnistiado con la Paz de Utrecht, regresó desde su exilio trayendo la obra de Cranach a su palacio de Orihuela.

Pocas obras en españa

El Museo de Bellas Artes de Bilbao suma así un óleo de Lucas Cranach el Viejo al reducido conjunto de obras originales de este autor conservadas en museos españoles: cinco pertenecen al Museo Thyssen-Bornemisza, tres al Museo del Prado, una al Museo Lázaro Galdiano, una al Museo de Bellas Artes de Sevilla y una al Museu Nacional d'Art de Catalunya.

De ellas, únicamente en 'La ninfa de la fuente', de la colección Thyssen-Bornemisza, se representa un desnudo femenino, mientras que las demás son temas religiosos, retratos o paisajes.

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