«La han puesto en un par de noches, a escondidas», explica Teresa, una de las vecinas afectadas. La antena en cuestión se ubica en la carretera de Madrid, junto al colegio de educación especial San Antonio.

Ayer, la Policía acudió al lugar para pedir la licencia a los trabajadores y levantó acta, paralizando las obras hasta que se compruebe la documentación. Las asociaciones vecinales están muy concienciadas con el problema de las antenas, que se da en casi todos los barrios. En el Actur, por ejemplo, una antena retirada con sentencia judicial volvió a instalarse camuflada dentro de una chimenea.

En julio, el Ayuntamiento modificó la normativa sobre la implantación de este tipo de elementos de tal modo que  las 270 antenas para móviles existentes en la actualidad modifiquen sus condiciones  cambiándolas por otras más pequeñas, con menor intensidad de ondas.