La Audiencia Provincial juzga este lunes a dos inmigrantes en situación ilegal en España que el pasado 29 de marzo fueron sorprendidos en Torrelavega con ocho paquetes de hachís con un peso total de siete kilos, destinado a la venta a terceros y cuyo valor en el mercado se ha estimado en 9.700 euros.

El fiscal pide para cada uno de ellos cinco años de prisión, que será sustituida por la expulsión de España con prohibición de regreso durante 10 años, y 38.800 euros de multa, por un delito contra la salud pública.

Los acusados, que están en prisión preventiva desde el día de los hechos, llevaban el hachís en un vehículo y lo arrojaron a la vía pública en la localidad de Torres al observar la presencia policial. En el momento de la detención uno de ellos llevaba 1.600 euros y tres teléfonos móviles.