Efectivos de la Guardia Civil han detenido en la provincia de Burgos a dos conductores, uno de los cuales arrojó tasas positivas de alcoholemia y otro que intentó atropellar a los agentes que le multaron por una infracción, han informado a Europa Press fuentes del Instituto Armado.

El primero de los sucesos se ha producido sobre las 23.30 horas del día 5 de noviembre, cuando personal perteneciente al Subsector de Tráfico de Burgos procedió a la detención de J.G.S, de 60 años, como presunto autor de un delito contra la seguridad vial (alcoholemia).

Los hechos se produjeron en la carretera CL-629, kilómetro 89,500, Merindad de Montija (Burgos), cuando una Patrulla de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil de la Compañía de Medina de Pomar, tras denunciar por una infracción al Reglamento General de Conducción al conductor de un turismo, observaron que su conductor pudiera encontrarse bajo los efectos del alcohol por lo que solicitaron una patrulla para que le realizara las pertinentes pruebas.

Esta persona arrojó unos resultados 0,91 y 0,87 miligramos por litro de aire espirado, constitutivos de un supuesto delitos contra la seguridad vial al superar los límites establecidos.

Por otra parte, ese mismo día sobre las 20.15 horas, en la Autovía A-1, kilómetro 233, término municipal de Villagonzalo Pedernales, personal dependiente del Subsector de Tráfico de Burgos detuvo a B.F, de 35 años, como presunto autor de un delito contra la seguridad vial y atentado contra agente de la autoridad.

Tras denunciar a esta persona por una infracción a la Ley de Seguridad Vial, el individuo continuó la marcha de forma brusca con su vehículo y trató de atropellar a los agentes y puso en peligro al resto de los usuarios. Los agentes pudieron detener al individuo tras resistirse fuertemente y llegar a agredir físicamente a los agentes.