La regularización de inmigrantes excluye a amas de casa y niños

En una familia, quien no trabaje no tendrá permiso.
La Asociación Alicante Acoge criticó ayer que en el proceso de regularización de extranjeros, que finaliza el 7 de mayo, se vincule al contrato de trabajo exclusivamente, y se deje así fuera a buena parte de los inmigrantes, por ejemplo, a amas de casa, niños y ancianos.

La asociación también llama la atención sobre los crecientes problemas de los colegios públicos para integrar a los escolares extranjeros. Los recursos que aporta la Administración son pocos y llegan tarde. Por ello, cada vez son más los que tienen que recurrir a ONG y entidades privadas para organizar las clases de apoyo y refuerzo para estos escolares.

Alicante Acoge atendió en 2004 a 7.008 inmigrantes, 1.500 más que el año anterior. El 80% de ellos se encontraban en situación irregular en nuestro país. La mayoría eran mujeres, sin papeles, con estudios secundarios y sin empleo.

Los grupos más numerosos proceden de Ecuador y Colombia (3.940), Marruecos y Argelia (1.505) y de los países del Este (664). Lo que más les preocupa es encontrar un trabajo y los servicios sanitarios. La mayoría se colocan en el trabajo doméstico. En nuestra ciudad, un inmigrante tarda unos cinco años en integrarse. Tiempo que dedica a encontrar trabajo, vivienda y traer a su familia.

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