La Ertzaintza está colaborando con la policía francesa en las labores de seguridad del partido entre el Olimpique de Lyon y el Athletic que tendrá lugar el próximo jueves en la ciudad francesa. A la cita se estima que acudan 500 aficionados vascos a los que aconsejan evitar espacios cercanos al 'Gerland Stadium', donde habitualmente se concentran los aficionados locales.

Según ha informado el Departamento vasco de Interior, agentes de la comisaría de Bilbao están ultimando las labores de coordinación con la policía francesa para garantizar la seguridad de los aficionados que acudan al encuentro de Europa League, tanto en sus desplazamientos hasta el estadio como durante el encuentro y a la finalización del mismo.

Varios ertzainas se desplazarán hasta Lyon, anticipándose al contingente de aficionados vascos que se espera acudan a presenciar el partido.

Durante los últimos días, la Ertzaintza ha intercambiado información con la policía francesa, cuyos responsables les han trasladado una serie de recomendaciones a tener en cuenta por parte de los aficionados vascos.

Entre ellas está la de no frecuentar los alrededores de la plaza Galtier, lugar de concentración habitual de los aficionados radicales franceses. También se recuerda la prohibición de utilizar material pirotécnico, punteros láser y cualquier otro objeto susceptible de causar lesiones, cuya entrada al recinto deportivo está estrictamente prohibida.

Además, se recuerda la prohibición de ingerir bebidas alcohólicas en las vías públicas de Lyon, así como que el estado de embriaguez o el consumo de drogas pueden conllevar el arresto por parte de la policía.

En cuanto a los desplazamientos al estadio, la policía gala recomienda la utilización del transporte público, especialmente el metro, cuya línea tiene una estación junto al estadio. Para quienes vayan en coche o en autobús el parking estará situado en la calle Jean Bouin, también al lado del recinto. La entrada al mismo para los aficionados visitantes deberá realizarse por el acceso sur-este, entre las calles Jean Bouin y Pierre de Coubertin, previendo las posibles aglomeraciones de última hora.