Representantes del Gobierno central y de la Junta de Andalucía, así como profesionales del sector han abordado este jueves, en el transcurso de una mesa redonda organizada conjuntamente por la Diputación de Sevilla y la Consejería de Cultura y Deporte, el papel del mecenazgo como vía de financiación de monumentos y otros elementos de patrimonio.

En concreto, según ha informado la Diputación en una nota, en esta mesa redonda, titulada 'Monumentos y Mecenazgo', han intervenido, en calidad de coordinador y en representación de la Consejería de Cultura, José Cuaresma Pardo, así como Margarita Ruyda de Andrade —miembro del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (Inaem), del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte—; Ana Almagro, arquitecto del Programa de Conservación de Patrimonio Histórico Español de Caja Madrid, y Alfonso Jiménez, arquitecto de la Catedral de Sevilla.

Mientras José Cuaresma ha destacado la "importancia" del mecenazgo "ante la nueva realidad económica que vive España", Margarita Ruyda ha detallado las "nuevas filosofías" que está abrazando en este terreno la organización de la que forma parte, enfocadas hacia la "sostenibilidad" y la "satisfacción del visitante" de teatros y salas.

Así, ha explicado que esta nueva misión consiste en "localizar e identificar a los públicos de interés y conocer el entorno particular de cada teatro y auditorio integrándose en la vida natural de todo lo que los rodea", es decir, "empresas, asociaciones culturales y vecinos", entre otros círculos.

Al hilo de ello, Ruyda se ha referido a la creación de un departamento de marketing y patrocinio en el Inaem —"el primero que se crea dentro de un Ministerio en España"—, que cuenta entre sus objetivos con "la promoción de la marca 'Cultura española' tanto fuera como dentro del país, la búsqueda de la implicación de la ciudadanía desde los núcleos locales y el aleccionamiento de los altos directivos de las principales empresas españolas sobre lo qué es y qué supone la cultura española".

Por su parte, Ana Almagro ha relatado cómo han evolucionado las posibilidades de intervención de la Fundación Caja Madrid como mecenas, que ha pasado "del mero patrocinio en 1992 hasta la gestión de proyectos culturales completos de restauración a partir de 2003", y ha puesto como ejemplo la recuperación del campanario de la Catedral de Pamplona, con la que se consiguió "un aumento del 32 por ciento en las visitas", para lo que "se aunaron la puesta en valor, su recuperación y su musealización con su posible autosuficiencia económica".

Según esta ponente, las nuevas estrategias de gestión de estos monumentos "tienen que pasar por un acercamiento del patrimonio a la ciudadanía, completar los equipos de trabajo con profesionales y expertos en marketing y difusión y ofrecer un valor variable según las necesidades del visitante, además de desterrar el recelo a relacionar monumento y patrimonio con actividad económica".

Por último, Alfonso Jiménez, que además de arquitecto de la Catedral de Sevilla es uno de los responsables del documento 'Proscaenivm', estudio que sentó las bases de la intervención del Teatro romano de Itálica, ha calificado de "muy complicado" el trabajo en este terreno que "se aventura" en Andalucía por "la desaparición del dinero público y, casi por completo, del mecenazgo de las cajas de ahorro", así como por "la poca preparación y conciencia por parte de los gestores designados por la Iglesia católica para su administración del patrimonio en Andalucía".

En su opinión, "los monumentos que han sabido ser autosuficientes económicamente son contados", y su situación será "imposible" si "no se produce un cambio de mentalidad en instituciones, empresarios y público".