Para ello, plantean seis rutas con carriles exclusivos para el bus por las principales avenidas que conectan el centro con las rondas (como se puede ver en el plano).

Estos carriles permitirán duplicar la velocidad media de los autobuses, ahora de 12 km/h, con lo que alcanzarían hasta los 30 km/h.

Circular por el centro en coche será complicado. Por ello, además plantean crear 18.000 plazas de aparcamiento. Unas para los vecinos y otras para que la gente de otros barrios o de fuera de la ciudad dejen allí el vehículo y se puedan mover en bus o a pie. Se harían de forma progresiva, según la necesidad.

Los accesos a la estación están diseñados para que puedan pasar por allí cerca de 20.000 coches cada hora en condiciones óptimas de circulación.

El triple de cruces sin el tren

Para cruzar de un lado a otro de las vías sólo tenemos siete posibilidades: (de norte a sur) La Pilarica, túnel de Vadillos, Circular, Labradores, Arco de Ladrillo, camino de la Esperanza y calle Daniel del Olmo (polígono de Argales). Cuando se soterren las vías, se crearán 13 nuevas conexiones entre calles ahora desconectadas, lo que a juicio de los diseñadores evitará los embudos que ahora se forman.