El presidente de Kutxabank, Mario Fernández, ha exigido al Gobierno "estabilidad" regulatoria para decidir sobre eventuales fusiones, si bien ha asegurado que no tiene "prisa" para "arriesgarse sin necesidad", habida cuenta que la entidad resultante de las tres cajas vascas cuenta con excedente de capital tras las pruebas de Oliver Wyman.

"Cuando tomas una decisión (de fusión) necesitas saber cuál va a ser el régimen regulatorio, porque te puedes equivocar por ti mismo, pero no porque la operación se convierta en un horror al cambiar la regulación", explicó en un desayuno organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE).

"No se puede jugar un partido de futbol y que a los 15 minutos piten falta porque se estaba jugando al baloncesto", ejemplificó Fernández, para después negar "presiones" del Ejecutivo y tener "preferencias especiales". Eso sí, cifró en 130.000 millones de activos la cota hasta la cual Kutxbank podría lograr sinergias en fusiones, desde los alrededor de 74.000 millones con lo que cuenta en la actualidad.

En este sentido, pidió al Ministerio de Economía y al Banco de España que no hagan de "celestina" en el proceso de concentración del sector, para que se limiten a clarificar las reglas del juego. El presidente de Kutxabank además defendió que las fusiones se materialicen teniendo en cuenta sus efectos sobre el empleo, por lo que abogó por operaciones que "minimicen" el impacto en los puestos de trabajo.

En cuanto al banco malo', aseguró que "no tiene sentido" participar en la sociedad formada por las entidades nacionalizadas, aunque sí que dijo que Kutxbank estudia segregar todos sus activos inmobiliarios, más allá de los adjudicados, como el resto de la cartera de crédito vinculada al 'ladrillo'.

El presidente del banco de la fusión de las tres cajas vascas criticó la implantación de la Tasa Tobin en once estados miembros del euro, entre ellos España. "Sería equivocado por tener condiciones diferentes que perjudicarán la competencia", argumentó.