El Sindicato Unificado de Policía (SUP) se ha concentrado este martes, coincidiendo con la Festividad de los Santos Ángeles Custodios, en señal de protesta por "los recortes en retribuciones y medios materiales".

Al respecto, la Comisión Ejecutiva Regional de dicho sindicato ha puesto de manifiesto, en un comunicado, que España "como nación jurídico-política y los ciudadanos españoles o que residen en este territorio, se encuentran en una grave encrucijada, ya que estamos en una situación de emergencia social que en el horizonte más cercano no se vislumbra que pueda tener una solución".

Y es que, lamenta, "ese espíritu de concordia, de policías al servicio del pueblo, cumplidores de la ley y garantes de la protección de los derechos, libertades y seguridad de los ciudadanos, se ha ido degradando progresivamente".

"La situación actual de crisis económica está acompañada por una crisis institucional, de desprecio a los valores democráticos, de ausencia de repudio a prácticas corruptas y por un alejamiento cada vez más evidente entre ciudadanía y política y ante todos esos problema, en este clima enrarecido, a profesionales del Cuerpo Nacional de Policía nos corresponde manifestar como ciudadanos nuestro desacuerdo con esta situación", incide el SUP.

Así, llama la atención sobre "prácticas de dudosa legalidad, de amiguismo en nombramientos, en concesión de condecoraciones, en puestos de trabajo, en destinos o ascensos, de injerencia en procesos electorales".

Al mismo tiempo, argumenta, "no hay políticos que hayan cumplido sus promesas electorales y la evolución de la estructura del Estado ha devenido en desigualdades y agravios salariales, en medios materiales, protección jurídica y de todo tipo, resultando que llevar en el brazo un escudo de una Comunidad Autónoma o un Ayuntamiento, con menor formación, riesgo, movilidad, supone tener garantizado un mejor salario".

Por ello, reivindica que el Cuerpo Nacional de Policía "es en media salarial el peor pagado de España", y denuncia que el Gobierno "nos ha engañado, no cumple sus promesas".

Por lo expuesto, señala hoy como "el Día del Robo a los Policías, un paso más en la concesión corrupta de recompensas profesionales que a quien más daño hace es a quienes habiendo actuado con riesgo, esfuerzo, profesionalidad y dedicación y habiendo por ello merecido la condecoración que reciben, ven como ese mismo reconocimiento se otorga a quienes hace muchos años que no salen de un despacho".