Actúan en los puntos de más aglomeración.

Como los seis bosnios que han detenido y que formaban una banda organizada –cinco mujeres y un hombre– que merodeaban en los andenes de la L4 en la plaça Urquinaona, durante las fiestas de la Mercè.

Un vigilante de TMB advirtió su actitud sospechosa y alertó a la policía, que procedió a su detención.

Todos tenían antecedentes y su situación de residencia es ilegal. El juez decretó prisión provisional.

Camuflados de visitantes

"Ya no se distinguen por su forma de vestir", admite Bastidas. Ellas ya no visten faldas anchas llamativas, ni grandes pendientes de aro, ni llevan coleta en la melena negra. Ellos imitan a los turistas, con ropa de marca. «Se camuflan y mimetizan muy bien».

Una breve inspección permitió a los Mossos detectar que, tras cometer el hurto, salían rápidamente hasta un punto en obras de la estación donde arrojaban lo sobrante.

Desde las ocho de la mañana –hora de mayor aglomeración– hasta las 19.45 h, en que fueron detenidos, los agentes encontraron nueve carteras y dos bolsos con las tarjetas de crédito, documentación y otros objetos que pertenecían a 11 víctimas.

Según Bastidas, bandas como los detenidos, de entre 18 y 23 años, están organizadas de forma jerárquica. «Dos de contravigilancia, el detector que marca la víctima propicia (bolsillos anchos, descuidos, bolsos abiertos...), el especialista (con dedos como pinzas) y el jefe (que distribuye el botín).

Incidente en la L2

Los Mossos aconsejan vigilar sobre todo «los bolsillos traseros, aunque lleven botón, y los bolsos».

Ayer, entre las 20.25 y las 20.54 horas, la Línea 2 estuvo cortada entre las estaciones de Passeig de Gràcia y Maragall, después que uno o dos ladrones se escondieran en los túneles tras robar en una tienda del metro, según TMB y testigos presenciales. No los encontraron.