La firma donostiarra Composite Patch prevé la apertura de una planta de producción en Gipuzkoa, desde donde atenderá al mercado internacional, principalmente al mercado europeo de suministro náutico y eólico.

Tras casi cuatro años de desarrollo tecnológico, en noviembre de 2011 Composite Patch comenzó a comercializar su producto, un kit de reparación de materiales compuestos, capaz, según destaca la firma, de realizar arreglos "en tiempos cortos y condiciones adversas".

En los diez primeros meses de actividad, la firma ha logrado acceder a diferentes sectores como naval, eólico, grandes tuberías, agrícola o aviación. Además, el producto se comercializa ya en países como China, Chipre, Francia, Lituania, Ucrania, EE.UU., Italia, Inglaterra, Canadá o Bahrein.

En esta rápida internacionalización también ha influido la presencia de la empresa en múltiples ferias, según información de Estrategia Empresarial recogida por Europa Press.

En la actualidad y hasta la apertura de la planta de Gipuzkoa, su producción se realiza en Valencia y Francia, así como en menor medida en el laboratorio de desarrollo que la firma posee en San Sebastián.