Son las 7.00 horas de la mañana. El sonido del despertador en varias decenas de casas de las urbanizaciones que rodean La Pobla de Vallbona (Valencia) anuncia un nuevo vía crucis para un centenar de niños de entre 3 y 10 años y para sus padres, quienes desde hace 11 días se ven obligados a recorrer a pie los cuatro kilómetros que separan por carretera sus casas del colegio público Mas de Tous.

De esta forma, como si de auténticos peregrinos se tratara, caminan en fila india desde las 8.10 horas de la mañana ataviados con sus mochilas y con chalecos reflectantes.

No es para menos, ya que más de la mitad del recorrido discurre por una pequeña carretera de campo por la que, según los padres, no caben "dos coches en paralelo" y en la que no existen "aceras". Por suerte, una dotación de la Guardia Civil los acompaña para reducir los riesgos del tráfico.

Según han explicado fuentes del AMPA a 20 minutos, este año, por primera vez, les han quitado "el transporte escolar". El motivo es que, aunque la ley obliga a poner transporte a quien viva a más de tres kilómetros del colegio, la Conselleria de Educación ha establecido que deben ser tres kilómetros lineales. En este caso, la distancia es superior a tres kilómetros por carretera, pero inferior en línea recta, aunque los padres aseguran que es "materialmente imposible hacer el recorrido de forma lineal".

En total, en este centro hay 200 menores que se han quedado sin transporte escolar este año, aunque la mitad se las han podido ingeniar para que los lleven en coche. Una suerte que no tienen el otro centenar de niños afectados.

El caso del Mas de Tous no es aislado. También están teniendo déficit de plazas o ausencia de transporte escolar los centros El Saler, Vicente Trenco, Evaristo Calatayud y Juan XXIII de la provincia de Valencia, además del Número 5 y Cañada de Fenollar en la de Alicante.

Desde la Conselleria de Educación aseguran que los núcleos urbanos que no tienen transporte están a menos de tres kilómetros de distancia del colegio en línea recta, tal y como marca la ley. Aun así, dicen, harán excepciones cuando las condiciones geográficas impidan llegar al centro en esa distancia, como pasa en La Pobla de Vallbona. Además, replican que han invertido 61,5 millones de euros en transporte escolar, "más que Andalucía o Extremadura".

Paz Sánchez. 46 años, maquilladora.

Paz es una de las afectadas por la falta de transporte escolar en La Pobla de Vallbona. Según explica, tiene dos hijos, de 9 y 10 años, y carece de la posibilidad de llevarlos "en coche". Cuenta que hay días en los que llegan al colegio llorando "del cansancio". Esta madre no entiende que de la noche a la mañana los hayan dejado tirados: "No es que hayan reducido plazas o que nos hayan reducido la subvención, es que se lo han cargado de un plumazo, no hay derecho". Además, asegura que caminar por esa carretera es "un peligro".