Sónares militares

Los sónares de embarcaciones militares han producido algunas de las muertes. Por ejemplo, la de las cuatro ballenas (de la especie zifio) que aparecieron en la costa almeriense el 27 de enero de este año. Un equipo de la Universidad de Canarias tomó muestras a los cuerpos. Los resultados apuntaban como causa a estos instrumentos, usados para detectar submarinos. Los pulsos acústicos que emiten a baja frecuencia les reventaron los oídos.

No es un caso aislado. Ocurrió lo mismo en Canarias (El Hierro) en 2002, tras unas maniobras de la OTAN, y en las Bahamas en 2000.

Por eso, Ecologistas en Acción y WWF/Adena han emprendido una campaña  para intentar que la UE proteja áreas concretas (el Estrecho de Gibraltar o el mar de Alborán, entre otras), que coinciden con zonas de población de grandes mamíferos. En ellas estaría prohibido usar sónar. 20 minutos ha intentado contactar con el Ministerio de Defensa español para conocer qué opinión le merece esta propuesta, sin que hasta ahora haya obtenido respuesta.

causas de las muertes

Contaminación: Los buques que constantemente cruzan el Estrecho producen contaminación acústica, lo que puede provocar sordera a muchas ballenas y delfines de la zona. Además, los residuos sólidos pueden provocarles infecciones y que sus estómagos queden bloqueados.

Barcos: Las hélices de las embarcaciones han sido las causantes de numerosas heridas de diversa consideración en muchos especímenes hallados en Andalucía.

Redes: Otra causa muy común de muerte es que el animal se quede atrapado en algún tipo de red. Marruecos, según Adena, utiliza aún redes de deriva, prohibidas desde hace tiempo en otros países. Unos 15.000 delfines mueren al año en el Mediterráneo, según este grupo, por estas redes. Se encuentran en la superficie del mar y «van atrapando de todo, sin ningún tipo de excepción».