Primeras condenas por agresiones de pacientes

Los trabajadores del Sergas denunciaron 30 casos graves en 2005. Insultos y empujones son «muy frecuentes» en urgencias y atención primaria.
Insultos, amenazas y hasta violencia física. Las agresiones de los usuarios de la sanidad pública gallega al personal sanitario son un fenómeno creciente, afirma José Barreiro Díaz, letrado jefe del Sergas. En 2005, se presentaron 30 demandas contra pacientes en toda Galicia.En los ocho primeros meses de este año, ya sumaron 21 denuncias.

Se trata de casos graves, como el reciente ataque con arma blanca a una enfermera en A Coruña o el sufrido el diciembre pasado por un médico de Coia, en Vigo. La violencia verbal y los empujones, algo «muy frecuente en atención primaria y urgencias», apunta Barreiro, no suelen llegar a los juzgados.

Cinco años de proceso

Aunque los procesos judiciales pueden durar hasta cinco años, desde 2004 los jueces ya han dictado tres sentencias condenatorias. La última, de este año, obligó al paciente a indemnizar con 1.700 euros al profesional al que agredió, que tuvo que cogerse una baja laboral.

Denuncias en galicia

A Coruña: En lo que va de año se han denunciado ocho agresiones de pacientes. En 2005 hubo nueve.

Pontevedra: Es la provincia en la que se producen más denuncias. En los ocho primeros meses de este año se presentaron diez. En 2005 hubo once.

Lugo: Tres denuncias este año, y nueve en 2005.

Ourense: Hasta septiembre, no se ha presentado ninguna demanda por agresiones a personal sanitario, pero el año pasado hubo una.

Agresiones

Sobre todo, verbales: Entre 2004 y los tres primeros meses de 2005, el Sergas contabilizó en Galicia 139 agresiones de pacientes a personal sanitario. De ellas, 116 fueron verbales.

Más en hospitales: Se producen el 64% de los casos de violencia de pacientes. El resto, en ambulatorios.

Carmen G. Rivas  sindicato enfermería

«Si no ponen avisadores, repartiremos silbatos»

El Colegio de Enfermeros defiende la contratación de vigilantes de seguridad para reducir las agresiones a personal sanitario, pero el Sindicato de Enfermería no cree que sea la única solución.

¿Qué proponen ustedes?

Hay que inculcar un buen comportamiento a los usuarios, no todo se va a arreglar con guardias de seguridad. La Xunta prepara un protocolo para evitar los riesgos de agresión.

¿En qué sentido?

Hay que procurar que el profesional no esté solo, mediante un avisador de emergencia, por ejemplo. Pero si no ponen avisadores, repartiremos silbatos.

¿Cómo se puede reducir el número de agresiones?

Hay que invertir en minimizar las situaciones de riesgo. Para evitar la crispación, es importante agilizar la atención al usuario. Hay puntos de la red pública que están masificados.

BIO

Representa al sindicato en toda Galicia desde hace más de una década. Ejerce como enfermera desde 1977.

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