Cantabria tiene un perfume "excelente" y huele a "gálbano, musgo de encina y lavanda con un fondo amanerado muy suave", según el perfumista catalán Jimmy Boyd, que ha considerado que la región posee una conjugación de olores "muy elegante".

Boyd ya ha realizado perfumes con el olor de Guipúzcoa, Vitoria, Asturias, Valencia, Málaga, Mérida o Cantabria, entre otros, y ahora se ha propuesto recoger la esencia de Santander, tal y como ha anunciado, y para lo que, según ha dicho, va a mantener reuniones con "las autoridades gubernamentales".

Así lo ha manifestado este miércoles Boyd en Santander, donde imparte el taller de perfumería 'Aprendiendo olores' en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), un "hecho histórico" porque es "la primera vez que la perfumería entra en las aulas universitarias".

Boyd, que ha trabajado durante siete años como director de producción de Perfumes Rochas, intenta que el perfume se vea como "algo más que una botellita en una estantería", ya que detrás de ésta se esconden "gotas" de cítricos, hierbas, especies o flores que, en la mayoría de las ocasiones, pasan desapercibidas para el olfato de los ciudadanos.

Y es que, según el perfumista catalán, las personas del mundo moderno se están convirtiendo en "auténticos autistas sensoriales" y están condenando a su cuerpo a "una desconexión sensorial". "Vemos pero no miramos, cogemos pero no tocamos y oímos pero no escuchamos", ha aclarado.

En el caso del olfato es "aún más importante", ha considerado Boyd, que ha asegurado que la gente "no es consciente de que tiene un órgano que se llama nariz, que huele", una percepción que ha ido desapareciendo a medida que "el olfato deja de ser imprescindible para la subsistencia del ser humano".

Renacimiento de la '

Cultura del olfato'

Sin embargo, el asesor creativo de numerosas empresas internacionales como Margaret Astor ha manifestado que la 'cultura del olfato' está viviendo un "renacimiento", al igual que lo han tenido la gastronomía o la enología, porque los ciudadanos o consumidores huyen de "la masificación" y buscan cosas más exclusivas o diferentes.

A este respecto, ha indicado que están surgiendo nuevos conceptos de perfumería como la venta de perfumes "pequeños y desconocidos" o la creación de "un lenguaje común entre comprador y dependiente" para que la persona pueda encontrar "su perfume".

Hasta ahora el oficio del perfumista ha sido "un mundo muy cerrado" —se tardan 10 años en llegar a ser un "perfumista normal"—, pero "poco a poco" el público quiere conocer "más cosas" de lo que hay detrás de la perfumería.

Boyd, que tiene dos líneas de perfume propias en el mercado —'Las frescas' y la que haya creado en cada lugar recogiendo su aroma— ha señalado que, durante cinco años, ha entrevistado a más de 3.000 mujeres de toda España para conseguir un "correlación entre el olor y la personalidad", un estudio del que ha obtenido 14 arquetipos de mujeres que encajan con 14 familias de olores.

"Las mujeres hogareñas de más de 50 años buscan perfumes que lleven rosa; la country moderna, que tenga hoja de té; y la creativa quiere jazmín", ha señalado como ejemplos de las relaciones que ha encontrado entre los tipos de mujer y el olor que eligen cuando compran un perfume.