El concejal de Servicios Urbanos del Ayuntamiento de Avilés, Luis Ramón Huerga, ha atribuido a un error en los planos que muestran el discurrir de las tuberías el accidente que ha provocado un escape de gas en el entorno del edificio Maspalomas, en la confluencia de las calles José cuento y González Abarca.

Según ha explicado en declaraciones a los medios, tras visitar la zona afectada, la tubería estaba desplazada unos tres metros sobre lo que marcaba el plano, motivo por el que una de las máquina que en ese momento trabajaba en esa calle la picó y provocó el escape de gas.

"La tubería de 50 de gas estaba en el plano desplazada unos 3 metros, con lo cual las personas que estaban haciendo trabajando desconocían que ahí había una tubería de gas", ha explicado el edil, para añadir que "con la máquina se picó esa tubería y en ese mismo momento ya se ha escuchado el estruendo, se avisó a la policía, se hizo el corte del perímetro razonable para garantizar la seguridad a los comercios y se avisó a las viviendas".

La rotura de la tubería tuvo lugar a las 10:35 horas de esta mañana y ha obligado al corte del tráfico y al cierre de los establecimientos comerciales del perímetro del edificio Maspalomas debido a la fuga de gas a que dio lugar esta rotura, en la confluencia de las calles José Cueto y González Abarca.

La fuga quedó controlada a las 11:30 horas y la normalidad quedó restablecida a las 12, hora en que los comercios recuperaron su actividad y el perímetro de restricción de la circulación de vehículos y peatones quedó limitado al propio de los trabajos renovación de la acometida de saneamiento de la zona, que comenzó a ser ejecutado esta misma mañana por la empresa Aguas de Avilés

No fue necesario proceder al desalojo de ninguna vivienda y no hay constancia de que haya personas afectadas. A los vecinos y vecinas de las calles colindantes con la fuga se les recomendó cerrar sus ventanas mientras se procedía al cierre de las seis válvulas de gas que suministraban la tubería afectada.

En estos momentos, se mantiene cerrado el perímetro del edificio, aunque el Ayuntamiento confía en volver lo antes posible a la normalidad.

Según el edil, la avería "tenía una complicación porque afectaba a seis válvulas diferentes, con lo que tuvieron que hacer un pequeño despliegue para poder cerrarlo". "Se cortó el gas y los bomberos también acudieron para echar agua, garantizar la seguridad y hacer las mediciones correspondientes de la concentración de gas", ha añadido.

"Ahora estamos aguantando un poco el perímetro cerrado a pesar de las molestias que se pueden causar a vecinos y comerciantes. Cuando los bomberos nos digan que ya no hay posibles concentraciones de gas y que la seguridad está garantizada, en ese momento se abrirá el perímetro y volveremos a la normalidad".