Finalmente, Gordon llegó alrededor de las 7 de la mañana, dos horas más tarde de lo previsto, desplazando contenedores de lugar, tirando vallas publicitarias en calles como Beiramar o Pablo Iglesias, haciendo ceder varias ramas y árboles en Gran Vía o  Juan XXIII, donde aplastó un coche. En ninguno de estos casos hubo que lamentar daños personales.

El tráfico de Ría estuvo suspendido desde las 7.30 hasta las 9.30 horas, lo que dio lugar a la cancelación de cuatro barcos. Mientras, siete cargueros permanecieron fondeados en las Islas Cíes. Y es que las rachas de viento alcanzaron los 150 kilómetros por hora, una fuerza que logró derribar por completo el cerco de seguridad que rodea las obras de Casa Mar.

Los operarios de Fenosa también tuvieron trabajo en la mañana de ayer. Las parroquias de Bembrive, La Salgueira y la calle Alexandre Bóveda sufrieron cortes de luz.

Colapso de centralitas

El servicio telefónico de atención ciudadana 010 recibió entre la tarde del miércoles y la mañana de ayer numerosas llamadas de vigueses interesados en las medidas a adoptar ante el temporal, así como para quejarse de los desperfectos producidos tras su paso. La centralita de la Policía Local y la de los Bomberos también sufrieron momentos de colapso.

¿Qué piensas de las medidas adoptadas por el ‘Gordon’?

Noelia Fernández. Empeada de hostelería.

«Es lógico que alertaran  tanto a la gente, pues nunca se sabe lo que puede llegar a pasar. Tomar medidas de prevención siempre es importante. Lo que ya me parece exagerado es que suspendieran las clases en colegios e institutos».

Javier Cabrera. Licenciado en paro.

«Siempre es mejor tomar medidas, por seguridad, aunque luego no pase nada. En otras zonas de la comunidad se ha montado una buena; por ejemplo, en A Coruña. Así que, como dice el refrán, más vale prevenir que lamentar».

Eva Da Silva. Estudiante.

«Las informaciones fueron muy alarmistas. Deberían haber valorado mejor el alcance de la tormenta. Yo tenía todo preparado en casa por lo que pudiera pasar. En invierno hay días, y sobre todo noches, muchísimo peores que ésta».