La Ejecutiva del PSE-EE ha considerado que la sentencia por el fraude de la Hacienda de Irún, que condena al exdirector de esta oficina tributaria José María Bravo a 11 años de prisión y una multa de dos millones, demuestra que el dinero de los vascos "no está seguro en manos del PNV".

En un comunicado, los socialistas vascos han señalado que los vascos "no pueden confiar en el PNV para gestionar el dinero de todos los ciudadanos".

Además, han recordado que el fraude de la Hacienda de Irún es "uno más de los múltiples casos de corrupción y aprovechamiento del cargo en beneficio propio que se han destapado en los últimos tiempos".

Tras denunciar la "falsedad del modelo de gestión eficaz que ha pretendido vender el PNV", el PSE-EE ha destacado que, en cuanto la formación jeltzale deja de ocupar el poder en alguna institución, "se destapan casos de corrupción, aprovechamiento de cargo público para lucro personal o simple negligencia en la gestión de los recursos públicos".

En este contexto, ha apuntado que si las comisiones de investigación sobre estos casos "nacieron con la oposición del PNV, sus conclusiones tampoco han sido respaldadas por este partido". A juicio del PSE, la gestión jeltzale se resume en "un perfecto mapa de la corrupción, el clientelismo y la negligencia".

Por último, ha opinado que los vascos no pueden confiar en el candidato del PNV a lehendakari, Iñigo Urkullu, ya que "no se ha ocupado de vigilar la gestión de los impuestos de todos y ha escondido la cabeza cuando los casos de corruptelas y clientelismos han salido a la luz".