Un total de 140 obras originales, procedentes de todo el ámbito hispánico, concurren a la VI edición del Premio Tristana de novela fantástica, convocado por el Ayuntamiento de Santander y la Fundación Santander Creativa.

"Se trata de un récord de participación, que consolida el prestigio que ha adquirido este certamen bienal, quizá el único español de novela, en el ámbito institucional, dedicado el género fantástico", según destacó el concejal de Cultura, César Torrellas.

Torrellas subrayó la independencia y transparencia que caracterizan a este premio, junto con la calidad de su publicación, que corre a cargo de Menoscuarto Ediciones, una de las editoriales más destacadas de la reciente Feria del Libro Independiente en Cantabria, FLIC!

En cuanto a la procedencia de las obras presentadas a la sexta edición el certamen, el edil destacó que la mayoría son de América Latina, principalmente de Argentina, aunque este año se han registrado muchos trabajos de Madrid, Barcelona, Andalucía y Valencia.

"Tras la primera lectura del jurado, se estima que la calidad media de los originales es también superior a la de ediciones anteriores", afirmó Torrellas, quien hizo hincapié en que hay novelas excelentes y es notable los temas y las formas empleados.

En este sentido, precisó que hay obras de ciencia ficción, de futurismo, historias fantásticas, novelas góticas, esotéricas o ghost stories, así como temas contemporáneos y de actualidad, tratados en clave fantástica.

Torrellas recalcó que la disminución obligada de la dotación económica del premio no ha restado interés entre los escritores de ficción cultivadores del género, si bien se constata la presencia de novelistas no especializados, que han creado la obra ex profesor para participar en el certamen.

El concejal de Cultura anunció que, en los primeros días de septiembre, se conocerá la relación de finalistas, mientras que el fallo del jurado está previsto para el próximo 19 de octubre.

Asimismo, recordó que, este año, el jurado cuenta entre sus miembros con importantes personalidades como los académicos José María Merino y Luis Alberto de Cuenta, dos de los máximos especialistas en literatura fantástica.