En el caso de Barcelona, los afectados pudieron reclamar a AENA, que pagaba hasta 250 euros a cada pasajero con vuelo cancelado. El caso de Londres, sin embargo, es distinto. «El intento de atentado se considera una causa inevitable e imprevisible y lo máximo que pueden reclamar los afectados es la devolución del importe del vuelo», explica

Itziar Elorza, de la organización de Consumidores y Usuarios Vascos (EKA).

Otra de las consultas más recibidas en esta organización son las referentes a los viajes combinados (hoteles con tour) que ofertan las agencias. «Es habitual que en estos viajes el hotel no sea el que se publicitaba», comenta Elorza.

Problemas con el ‘overbooking’

Las organizaciones de consumidores vascas reciben durante el verano un buen número de llamadas de gente que se ha visto afectada por el overbooking. Tanto en aviones como en hoteles, las empresas venden más plazas de las que disponen, y no se puede hacer nada. «El overbooking es legal, pero debería haber un sistema para calcular cuántos clientes van a tener», dicen en la Unión de Consumidores y Usuarios Vascos.  Hay indemnizaciones, aunque «no compensan los daños».