El mundo de la moda, la publicidad y los medios de comunicación establecen los cánones de belleza, también para las mujeres embarazadas.

Así, se muestra la gestación como un estado ideal en el que las mujeres parecen inmunes a la mayor parte de los  trastornos habituales en el mismo, como retención de líquidos, cara hinchada y papada, tobillos gruesos, muslos enormes, pechos desmesurados y en general, pesadez e incomodidades varias. Actrices y modelos aparecen estilosas, delgadas y con su barriguita como un bonito añadido, casi etéreo. Una experiencia de la gestación que muy pocas tienen la suerte de compartir.

En el mundo real, muchas embarazadas no se sienten tan ideales, y los paparazzi se encargan de mostrar que no todas las celebridades encaran su gestación de la misma forma.

Una de las que más ha acusado el efecto de las hormonas ha sido la cantante y actriz estadounidense Jessica Simpson. Considerada una sexsymbol y después de ocupar los primeros puestos de los rankings de las mujeres más sexy del mundo, Jessica, que dio a luz en mayo, engordó desmesuradamente durante su embarazo. Al menos 20 kilos, según reconoció en una entrevista.

"He tenido un embarazo muy bueno. Comer y no tener que preocuparse demasiado por él ha sido muy divertido. Tomarme un descanso del régimen ha sido, sin duda, divertido", confesó.

Ajena a las burlas que recibió por su peso –llegaron a decir que tenía un embarazo de 17 años o que esperaba trillizos–, la actriz posó desnuda para la revista Elle para mostrar con orgullo su cuerpo.

Ahora se ha sometido a un riguroso programa de adelgazamiento, con una firma que le paga 4 millones de dólares por ser su imagen y lograr ese objetivo. Muchos se preguntan si lo conseguirá.

Algunas famosas como Hilary Duff, Jennifer Garner o la actriz de Bollywood Aishwarya Ray, que han sido madres recientemente, no han conseguido aún volver a su antiguo tipo.

Sienna Miller, que el pasado fin de semana se convirtió en madre, y Jessica Bueno, novia de Kiko Rivera, demuestran cuan normal es sentirse hinchada en el proceso. Ni Carla Goyanes ha podido escapar a los efectos secundarios, y ahora se parece más a su hermana Caritina.

Uma Thurman, que a sus 41 años está esperando su tercer hijo –el primero con su actual pareja, el multimillonario Arpad Busson–, ha engordado considerablemente, pero no deja de practicar yoga para sentirse en forma.

Por cuestiones de constitución o bien porque hacen dieta, algunas mujeres pasan por el embarazo con total frescura, como Megan Fox. La modelo de Victoria Secret Alessandra Ambrosio compartió su segundo embarazo por Twitter, mostrando su tipazo  a los pocos días de dar a luz. Pocas semanas después se incorporaba a sesiones de fotos sin atisbos de tripa. Así ha sido también para otra ‘angelita’, Miranda Kerr, y para Victoria Beckham, que ha pasado por cuatro embarazos como si nada. Elsa Pataky y Reese Witherspoon también han conservado intacta su belleza en sus embarazos.