El Servicio de Urgencias Canario niega que no se diese importancia a la situación en la que estaba un inmigrante al que el sábado noche acudió a atender en la Comisaría de Playa de las Américas, en el sur de Tenerife, y que luego falleció por parada cardiorrespiratoria.

De este modo respondieron fuentes del Servicio de Urgencias Canario al secretario general de Canarias de la Confederación Española de Policía, Agustín Brito, quien declaró que una primera ambulancia acudió a la comisaria para ver al inmigrante enfermo y al parecer no se le dio mucha importancia y se marchó.

Uno de los 57 inmigrantes que llegaron el sábado al puerto de Los Crisitanos de Tenerife en un cayuco falleció a última hora de la noche del sábado en las dependencias de la Comisaría de playa de Las Américas como consecuencia de un parada cardíaca, según informaron fuentes de la Confederación Española de Policía (CEP) en la isla.

Otro inmigrante que viajaba en la embarcación murió durante el trayecto.

Varios de estos inmigrantes, de origen subshariano, llegaron a puerto en malas condiciones de salud, con síntomas de hipotermia y deshidratación severa debido a la dureza del viaje. Cuatro de ellos tuvieron que ser ingresados en hospitales de la isla.

El inmigrante fallecido en la noche del sábado reclamó asistencia médica en varias ocasiones a lo largo de la tarde al sentirse indispuesto.

A pesar de ello, no fue trasladado a ningún centro hospitalario ni atendido en las dependencias policiales, según las mismas fuentes.

Esto provocó la indignación de sus compañeros de travesía, que reclamaron insistentemente a los tres agentes que les custodiaban que llamaran a un médico.

Los policías, que se vieron desbordados por la situación, tuvieron que solicitar refuerzos para calmar los ánimos a los inmigrantes.

Finalmente, un médico se personó en la Comisaría de la Playa de las Américas a las 22.00 horas. No obstante, nada pudo hacer por salvar la vida de este inmigrante, que falleció una hora después como consecuencia de una parada cardiorrespiratoria.

La CEP: "Fue una muerte anunciada"

Por su parte, la organización sindical Confederación Española de la Policía (CEP) definió este domingo el fallecimiento del subsahariano en la comisaría tinerfeña como "una muerte anunciada" debido a las pésimas condiciones sanitarias y de hacinamiento que ofrecen estas dependencias.

El portavoz del sindicato, Rodrigo Gavilán, alertó además del riesgo de fuga por parte de los inmigrantes que permanecen en comisaría, en los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIES) y en los centros de acogida, así como la imposibilidad de que los agentes puedan evitarto por escasez de efectivos.

Según denunció, en la citada comisaría hay dos agentes por turno para custodiar a 1.200 inmigrantes, que permanecen hacinados en unas pésimas condiciones de higiene y salubridad.

Se han dado casos, dijo, de contagios de tifus entre los policías.

Escapada en Gran Canaria

Por otra parte, dos embarcaciones con inmigrantes africanos llegaron este domingo al sur de Gran Canaria, donde la mayoría de sus ocupantes, cuyo número se desconoce, lograron dispersarse sin ser detenidos por la Policía y la Guardia Civil, que los buscan ahora por la zona, aunque han logrado detener a poco más de una docena de magrebíes.

La primera de las dos barcas arribó a las 07.40 horas en la playa de Maspalomas, cerca del Faro, según informó un portavoz del instituto armado, que no supo precisar el número de ocupantes que viajaba en esta embarcación, ya que es la Policía Nacional la que acudió a su encuentro. En los alrededores del Faro de Maspalomas efectivos del Cuerpo Nacional de Policía y de la Policía Local de San Bartolomé de Tirajana desarrollan un dispositivo de búsqueda para tratar de localizar y detener a los inmigrantes que tomaron tierra en la isla.

Una segunda barquilla, en esta ocasión una patera, fue detectada a las 08.15 horas cuando navegaba a 500 metros de la costa del Castillo del Romeral, también en el sur de Gran Canaria.

Tras avistar la embarcación con inmigrantes, se organizó un dispositivo de rescate por parte de la patrullera Almirante Díaz Pimienta del servicio marítimo de la Guardia Civil, que se dirigió a la zona para auxiliar a sus ocupantes.

Sin embargo, dada la escasa distancia a la que navegaba la patera, sus ocupantes lograron desembarcar en las inmediaciones del barranco de Tirajana, muy cerca de una central que Unelco-Endesa tiene en la zona, antes de que la patrullera del instituto armado llegara a su encuentro.

Otras tres pateras en Ceuta, Tenerife y Granada

La Guardia Civil de Ceuta ha interceptado en las últimas horas una patera en la que viajaban ilegalmente 18 inmigrantes, la mayoría de ellos hindúes, y ha detenido al patrón de la nave.

Según informó en un comunicado la Guardia Civil, la operación se realizó el sábado por la patrulla de costa al detectar a una milla una embarcación que ponía rumbo hacia Ceuta de forma sospechosa.

Otra patera fue interceptada este domingo en las costas de Granada, concretamente en Motril. En ella viajaban 65 inmigrantes irregulares, que presentan buen estado de salud.

El último en llegar durante la jornada de este domingo fue un cayuco con 104 inmigrantes, todos varones y mayores de edad, que fue remolcado hasta el puerto de Santa Cruz de Tenerife.