La Federación de Servizos Públicos de UGT cifra en un 65% la reducción del número de vigilantes fijos —en casetas— y en algo más del 25% la disminución de conductores de motobomba en el refuerzo de verano de la campaña contra incendios 2012.

Además, según sus cálculos, la cifra de emisoristas se recorta en un 50% en el dispositivo elaborado por la Consellería de Medio Rural para este periodo de alto riesgo y eleva la rebaja de los operadores codificadores y la de técnicos forestales y mecánicos a una horquilla que va del 80 al 100%.

El secretario del sector de Administración autonómica en la provincia de A Coruña, José Carlos Rocha, ha aportado estos números en una rueda prensa celebrada tan solo una hora antes de la reunión convocada por la consellería para debatir el operativo.

En total, 5.689 personas componen el operativo, 363 menos que en 2011, según recoge el Plan de Prevención e Defensa Contra os Incendios Forestais de Galicia (Pladiga).

A las 13.00 horas, los sindicatos han analizado con responsables del departamento de Rosa Quintana la relación de puestos de trabajo que, según estiman, la Xunta tendrá aprobada la próxima semana, de forma que las contrataciones puedan culminarse en torno al 15 de julio.

Para ello es preciso que todavía se reúnan la mesa general y el comité de personal, donde Medio Rural puede aprobar su propuesta sin el visto bueno de las centrales, algo que, como recuerdan, "ya ha ocurrido".

Unificar el dispositivo

UGT critica la "clara privatización" del servicio a través de la contratación a empresas como Natutecnia —que este año se encarga de la gestión de las brigadas helitransportadas— y censura, asimismo, la derivación de trabajadores hacia Tragsa.

"Demandamos que se unifique el dispositivo", ha subrayado Rocha, antes de resaltar que no entiende "por qué la consellería apuesta por un planteamiento tan variopinto en la estructura".

Para la organización sindical, asimismo, el incremento de las plazas de fijos-discontinuos es "positivo", pero constituye "un parche" ante el que exigen la cobertura de plazas vacantes —que fijan en 100— y el paso de 9 a 12 en los meses de contrato.

Alta siniestralidad

A mayores, advierten de la alta siniestralidad en el servicio contra incendios, lo que achacan al uso de instalaciones y medios materiales "deficientes" —incluidos los propios vehículos—.

Juan Carlos Rocha ha acusado al Gobierno gallego de "incumplimiento" en materia de seguridad laboral en el ámbito de la extinción y ha reprobado, al mismo tiempo, la "unilateralidad" de sus decisiones.

Esta falta de voluntad negociadora, ha incidido, es la que llevó a que trabajadores, con carácter individual, recurriesen a las demandas judiciales para reivindicar sus derechos, denuncias que "están ganando" en cuestiones como supuestos atrasos en el pago de los complementos por nocturnidad.

Reducción de libranzas

Por último, el sindicalista se ha referido a la idea repetida por la conselleira, en relación a que se cubrirán "las mismas jornadas de trabajo efectivo" en el monte debido a modificaciones de la normativa laboral.

Como ya advirtieron otras centrales —en concreto, la CIG—, Rocha ha denunciado que si se permite reducir el número de libranzas es por la Ley de medidas temporales en determinadas materias del empleo público de la Comunidad Autónoma de Galicia, y en contra de lo que dispone el quinto convenio del Servizo de Prevención e Defensa Contra Incendios Forestais (SPDCIF).