El Museo de las Encartaciones renueva sus instalaciones para mejorar sus apuestas didáticas y exposiciones temporales

El Museo de las Encartaciones ha presentado este martes sus nuevas instalaciones, tras completar sus obras de restauración que le han dotado de mayores espacios para sus apuestas didácticas y exposiciones temporales. El cambio permitirá al museo iniciar una nueva etapa en la que mejorará su oferta cultural y su "atractivo para Bizkaia" y, especialmente, para la comarca de las Encartaciones.

El Museo de las Encartaciones ha presentado este martes sus nuevas instalaciones, tras completar sus obras de restauración que le han dotado de mayores espacios para sus apuestas didácticas y exposiciones temporales. El cambio permitirá al museo iniciar una nueva etapa en la que mejorará su oferta cultural y su "atractivo para Bizkaia" y, especialmente, para la comarca de las Encartaciones.

Las novedades del museo, ubicado en Sopuerta, han sido explicadas por la presidenta de las Juntas Generales de Bizkaia, Ana Madariaga, el director del Museo, Javier Barrio, y la responsable del área didáctica, Ainara Arranz.

En su intervención, Madariaga ha destacado que la Casa de Juntas de Abellaneda acoge este museo "en permanente renovación y adaptación a las necesidades que va demandando la sociedad vizcaína" y que, gracias a "esta filosofía renovadora", se ha convertido en "un museo vivo y con alma por el que cada año pasan casi diez mil escolares".

La evolución experimentada por el Museo de Las Encartaciones desde que abrió sus puertas en el año 1994 se ha traducido, según han indicado sus responsables, en "el incremento y la mejora constante" de las acciones culturales. Entre su oferta, se encuentran exposiciones temporales, una colección permanente que "crece año tras año", actividades pedagógicas enfocadas a los centros escolares y fomento de publicaciones científicas, entre otras.

Para adaptarse a las demandas ciudadanas, el museo ha rediseñando sus espacios, de manera que en los últimos meses "se han reubicado y mejorado las zonas destinadas a actividades didácticas y exposiciones temporales, con el fin de ampliar los contenidos expuestos y generar espacios dónde desarrollar actividades paralelas".

El área didáctica ha sufrido "una gran evolución" que ha afecta tanto al número de participantes —que alcanza una cifra anual cercana a los 9.000 niños y niñas en los últimos años— como en la variedad de las actividades realizadas. Con los cambios espaciales, el museo podrá desarrollar nuevas actividades culturales, que se sumarán a los talleres que ya se imparten: "Tras los romanos", "Creando Monstruos", "Vive tu cuento", "Taller de Prehistoria", "Taller de Edad Media" o la "Actividad conjunta con la Ferrería de El Pobal".

Además, se ha ampliado el espacio dedicado a exposiciones temporales para que sean "más completas, atractivas y accesibles", adaptando y reubicación las antiguas salas dedicadas a Geografía y Prehistoria.

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